La crisis que atraviesa la Empresa Nacional de Telecomunicaciones (Hondutel), con pérdidas acumuladas de casi L1,100 millones, ha frenado cualquier posibilidad de realizar inversiones en infraestructura digital, cada vez más necesarias para la recuperación económica y social a causa de la pandemia del covid-19.
Han sido las herramientas y los servicios digitales los canales para que la sociedad siga con sus actividades y cubra las nuevas demandas, como la teleeducación, el teletrabajo y otros.
Datos
4,700 millones de lempiras es el pasivo total de Hondutel. En tanto, las cuentas por pagar sobrepasan los 3,400 millones.
1996, año en que se inicia la telefonía móvil con la puesta en marcha de la compañía Celtel, en el Gobierno del presidente Reina.
Durante 2020, empañado por el inicio de la pandemia y los huracanes Eta y Iota, la actividad de telecomunicaciones resultó ser prácticamente la única actividad económica que reportó crecimiento, gracias a la diversificación en los servicios ofrecidos de transmisión de datos por las compañías de esta actividad.
Justamente, en línea con los nuevos requerimientos residenciales y corporativos de teletrabajo, clases virtuales y entretenimiento. De igual forma, se incrementó el uso de la telefonía móvil (minutos cursados).
Tal tendencia continuó durante 2021, lo cual evidencia una continua demanda de los servicios de telefonía móvil e Internet, reportó el Banco Central (BCH).
“Ya sabemos que están en crisis, que nos les pagan (a los empleados) desde noviembre, que hay un grave problema de nepotismo dentro de la empresa, falta de deseos de trabajar y de colaborar y varios problemas internos; pero aquí el punto es ver hacia adelante, ver cómo se puede sacar la empresa adelante. Hay que ponerse creativos”, dijo el exgerente general Jorge Aguilar.
En su plan de Gobierno, la presidenta electa, Xiomara Castro de Zelaya, expuso que “la política en telecomunicaciones ha sido nula durante la última década, entregando al sector privado la administración y operación del espectro radioeléctrico y las frecuencias en general, y para su mayor beneficio, abandonando el espacio público de esos servicios, lo que ha venido a encarecer las tarifas telefónicas y limitar el acceso a Internet”.
Esto, señala la mandataria electa, ha repercutido “con graves consecuencias al sector educativo, principalmente, y en los sectores sociales y productivos del país. Hondutel ha sido debilitada después del golpe de Estado (del 28 de junio de 2009)”.
En su plan de trabajo, Castro de Zelaya propone implementar un plan de reestructuración integral y administrativo en Hondutel que, entre otros aspectos, adopte un nuevo giro y nuevos servicios a ofrecer, contrato colectivo justo, sostenibilidad financiera, indicadores, estándares y metas de productividad global y que garantice Internet al sistema educativo.
Para Aguilar, si bien la estatal requiere de inversión, la clave es “hacer cosas diferentes a las que se han estado haciendo”.
El exfuncionario consideró como desacierto que las autoridades realizan inversiones de fibra óptica en zonas como la colonia Kennedy (Tegucigalpa), donde “tienen a toda la competencia del mundo. Es un grave error”.
Al rescate
El integrante de la comisión de transición del nuevo Gobierno y diputado electo por el partido Libertad y Refundación (Libre) Hugo Noé Pino indicó que Hondutel, la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (Enee) y el Banco Nacional de Desarrollo Agrícola (Banadesa) requieren una restructuración muy fuerte para su recuperación.
“Estas tres instituciones requieren una reestructuración fuerte en el programa de Gobierno, se planteó y así lo señaló varias veces la presienta electa, Xiomara Castro”.
El economista y académico agregó que la recuperación de las tres empresas es parte del plan de trabajo del nuevo Gobierno y trabajan en esa dirección.
Noé Pino adelantó ya han tenido conversaciones con la empresa privada y el sector trabajador y, según él, les han mostrado varias alternativas para recuperar las estatales. “Se van a tomar las mejores decisiones en cada una de las tres empresas en beneficio del pueblo”, aseguró.
En el caso particular de Banadesa, el diputado electo explicó que están estudiando si continuará como un banco agropecuario o una institución que fomente la producción en términos generales, tanto industrial como agrícola.
El Sanaa
En tanto, representantes de las Juntas de Aguas anunciaron días atrás que plantearán a la comisión de transición del nuevo Gobierno que la administración vuelva al Servicio Autónomo Nacional de Acueductos y Alcantarillados (Sanaa).
El presidente de las Juntas de Agua, Manuel Amador, dijo que en primer lugar buscarán la derogación de la Ley Marco de Agua y Saneamiento “que es una ley nefasta que se aprobó en la administración del mandatario Ricardo Maduro en 2003, donde se le ha quitado precisamente la administración al Sanaa con el objetivo que iban a dar un mejor servicio”.
Sin embargo, cuestionó que tienen más de 17 años de implementar esa ley “y no ha habido nada positivo, todo lo contrario, indicó que más bien se ha venido agudizando la crisis”.
“Crisis de Hondutel debe resolverse de forma creativa”
TEGUCIGALPA. El exgerente general de Hondutel Jesús Arturo Mejía aseguró días atrás que la empresa estatal no está en quiebra y que los problemas que atraviesa deben resolverse “de manera creativa”.
Solo en diciembre de 2021, Hondutel perdió más de 79 millones de lempiras, y durante todo el año pasado registró pérdidas de unos 300 millones; mientras que las pérdidas desde 2018 a la fecha ascienden a más de L1,083 millones.
“Hondutel no está quebrada, está en una situación difícil que se puede resolver, pero en lugar de preocuparnos,debemos ocuparnos”, refirió Mejía.
“Hay que tomar medidas no drásticas, sino creativas para rescatar Hondutel”, agregó.A septiembre de 2021, según datos de la Secretaría de Finanzas, Hondutel sumaba 2,093 trabajadores.
En las últimas semanas se ha agudizado una crisis a nivel interno debido a que hay pagos atrasados en todas las oficinas de la estatal.
