Para entender el conflicto de tierras en la aldea Quebrada de Arena en Tocoa, departamento de Colón, hay que remontarse al inicio de 1970 cuando esas tierras fueron asignadas a los campesinos por parte del Gobierno, para procesos de Reforma Agraria. Así nacieron las cooperativas Camarones, Tranvío y El Chile.
Estas tres cooperativas suman 2,700 manzanas de tierras, en su mayoría cultivadas de palma africana, además de cultivos de granos básicos y haciendas ganaderas.
Con la Ley de Modernización Agrícola que se creó en los inicios de 1990 en el mandato del extinto expresidente Rafael Leonardo Callejas, estas tierras pasaron a ser usufructuadas por agroindustriales para modernizar el agro, ya que los campesinos las trabajaban de manera rudimentaria. Así se crean las empresas extractoras de aceite en la zona que han generado miles de empleos.
Johnny Rivas, dirigente campesino, dijo a Diario LA PRENSA que la Plataforma Agraria y la Coordinadora de Organizaciones Populares del Aguán (Copca), tienen 20 años de llevar un proceso legal para tratar de recuperar las tierras.
Los enfrentamientos entre campesinos y pobladores de Quebrada de Arena iniciaron el 24 de diciembre, cuando un grupo, a quienes la Plataforma Agraria tiene identificados como Los Cachos, desplazó a unos 150 socios de la cooperativa Camarones.
Ese día inició con ataques también a campesinos de las cooperativas Tranvío y El Chile. Estos pobladores han tenido protestas casi de manera permanente en la carretera CA-13, a la altura de Quebrada de Arena, obstaculizando el paso vehicular entre las ciudades de Tocoa y Trujillo.
Dirigentes campesinos aseguraron que hace cinco años las cooperativas lograron los títulos de propiedad, por lo que la Plataforma Agraria tomó posesión.
“No es la comunidad de Quebrada de Arena en sí, es un grupo de unas cuarenta personas armadas que son criminales y que están denunciados en el Ministerio Público. Ellos van a generar violencia con los campesinos que estamos en el proceso de reivindicar las tierras”, agregó.
“Nosotros tenemos documentación desde hace muchos años de los diferentes acuerdos que hemos tenido con los gobiernos que han pasado desde hace veinte años. Tenemos los títulos de propiedad definitivos y la documentación de cada una de las cooperativas”.
Propuesta de solución al conflicto
En un intento por poner fin al conflicto agrario en el Bajo Aguán, los pobladores de Quebrada de Arena, que se disputan las fincas con los campesinos, han puesto en la mesa una propuesta.
“Que se adjudique la mitad de tierra a cada grupo (pobladores de Quebrada y Plataforma Agraria), como término al conflicto que se vive en esta zona, dicho grupo que no acepte la mitad de la tierra, automáticamente se le adjudicará al otro grupo sin lugar a reclamo. No existe otra salida, entendiendo que ambos grupos son necesitados del acceso a la tierra”, dice el documento.
“En este proceso de paz intervendrán iglesias, cámaras de comercio, medios de comunicación, Ministerio de Seguridad, patronatos, Salud, Educación, juntas de agua, alcaldías, y gobernación de Colón. Asimismo, todas aquellas organizaciones que de una u otra manera se ven afectados por esta problemática”.
“Desde ya se les pide a ambos grupos un alto al fuego y un cese a la violencia, ya que la solución a esta problemática se definirá en el campo legal y no en una batalla campal. De nada servirá la violencia si ya está definido el plan a ejecutar, se les pide a ambos grupos desde ya aceptar esta normativa”, dice el comunicado.

Policía Nacional llama al diálogo
La Policía hizo un llamado a un diálogo para buscar soluciones pacíficas que ayuden a frenar el conflicto agrario en la aldea Quebrada de Arena. La Policía mantiene intervenida la comunidad con refuerzos que han llegado en los últimos días para evitar más enfrentamientos y un derramamiento de sangre.
En un comunicado, las autoridades policiales reiteraron “el llamado al diálogo y la búsqueda de soluciones pacíficas para evitar mayores confrontaciones y garantizar la tranquilidad” en Colón, donde al menos una decena de policías resultaron heridos el sábado en un enfrentamiento con manifestantes.
El domingo, los agentes policiales realizaron un operativo en Quebrada de Arena; sin embargo, fueron “atacados con piedras, bombas molotov y disparos de armas de fuego”, enfatizó el comunicado.
En el enfrentamiento entre policías y pobladores de Quebrada de Arena, los civiles le robaron un arma de fuego asignada a un policía, misma que fue entregada este lunes a los uniformados en un intento de buscar la paz en la región.
Comisión gubernamental
En 2023, la presidenta Xiomara Castro estableció la Comisión de Seguridad Agraria y Acceso a la Tierra para abordar los conflictos en Colón, pero hasta ahora el intento no ha tenido éxito.
Francisco Funes, ministro del Instituto Nacional Agrario (INA) y coordinador de la comisión de Seguridad Agraria, denunció el martes pasado que grupos criminales, narcotraficantes y políticos están involucrados en el conflicto agrario en Colón.
“Bandas criminales y narcotraficantes están tratando de sacar provecho de esta situación”, subrayó Funes, quien destacó que el INA actúa como “distribuidor de tierras”, pero que la solución al conflicto en Colón, especialmente en el valle del Aguán, requiere la participación de “todos los operadores de justicia”, acotó Funes.
Por otra parte, el Ministerio Público inició una investigación y en los próximos días podría haber requerimientos fiscales por la portación de armas de fuego.

Otros efectos que deja el conflicto
La lucha entre campesinos y pobladores también deja otros problemas en Quebrada de Arena. La suspensión del inicio de clases presenciales. Padres de familia y docentes ven un alto riesgo enviar a los estudiantes a los centros educativos por los repentinos enfrentamientos.
El instituto oficial Fausto Castillo Suazo colinda con un campamento de los campesinos y frente al colegio se registran ataques entre ambos grupos.
Además, productores y ganaderos denuncian que debido a tomas de la tierra, no pueden acceder a sus haciendas para cuidar el ganado y extraer el producto lácteo.
La Plataforma Agraria denunció el robo de ocho motocicletas a los campesinos, 30 bestias mulares, 8 carretas para uso con caballos, materiales y herramientas de construcción. Asimismo, saquearon una tienda de consumo llevándose productos alimenticios valorados en un millón 800,000 lempiras.
Los constantes enfrentamientos acabó con la relativa tranquilidad que se vivía en el pueblo. Los habitantes de Quebrada de Arena, que no tienen intereses en la lucha, se mantienen en zozobra y encerrados en sus casas.
“Ya no podemos ir ni a la pulpería porque tenemos miedo, corremos mucho riesgo enviar a nuestros hijos a comprar, ni a la iglesia podemos ir ya. El domingo no importó que estábamos en el culto, la policía lanzó gases lacrimógenos y nos sacaron de la iglesia”, se quejó una habitante del sector.
Al menos 300 personas de aldea protestaron el sábado en rechazo a la intervención policial, ya que sin una orden judicial se introducen a las casas en constantes allanamientos. Este lunes los habitantes de Quebrada de Arena salieron de nuevo a las calles exigiendo la paz en su sector.
Hace unos días los pobladores de Quebrada de Arena también denunciaron que grupos armados que pelean con los campesinos impusieron un toque de queda en la aldea, afectando el libre desplazamiento y la economía en la región.
El conflicto agrario ha cobrado la vida de unas 200 personas en los últimos años, según datos de las organizaciones campesinas del departamento de Colón.