Un total de 50 emprendedores provenientes de diversos sectores de la zona norte del país fueron certificados por la Comisión de Acción Social Menonita (CASM), como parte del proyecto Emprende Más.
Con la iniciativa buscan fortalecer el tejido empresarial comunitario y brindar alternativas sostenibles que mejoren la calidad de vida de las familias sampedranas.
Los participantes provienen de comunidades como las colonias Satélite, Bográn, Asentamientos Humanos, entre otras zonas de San Pedro Sula y alrededores.
Según explicó Edwin Perdomo, representante de Acción Social Menonita, los beneficiarios han recibido capacitación en áreas clave de emprendimiento, gestión de negocios, marketing, contabilidad básica, y atención al cliente. Además, se les otorgó un capital semilla para fortalecer o iniciar sus negocios.
“El objetivo de este tipo de proyectos es generar oportunidades económicas locales, evitar la migración forzada y fomentar la permanencia del talento en el país”, expresó Perdomo.
“Creemos en el potencial de estos emprendedores y por eso les hemos brindado herramientas prácticas para que sus negocios sean sostenibles y generen ingresos que beneficien a sus familias y comunidades”, agregó.
Historias de transformación
Jenifer Mejía, una joven emprendedora dedicada a la venta de artículos personalizados, compartió su experiencia, “me hablaron del proyecto y decidí participar, estoy muy agradecida porque no solo recibimos conocimientos útiles, también apoyo financiero. Ya estoy aplicando lo aprendido en mi negocio y he visto una mejora significativa”.
Por su parte, Kelvin Sánchez, especializado en servicios técnicos y de refrigeración, relató que lleva cuatro años vinculado al proyecto y que su vida ha dado un giro positivo.
“Este proyecto ha sido un éxito para mí, gracias al acompañamiento que recibimos, ahora también soy líder comunitario y en nuestro sector Rivera Hernández, hemos organizado a cerca de 60 emprendedores”.
El proyecto Emprende Más es impulsado por CASM con el objetivo de promover la resiliencia económica en comunidades de alto riesgo, fomentando el emprendimiento como una vía legítima para el desarrollo local y la estabilidad social.
La certificación de los 50 emprendedores representa un nuevo paso en la consolidación de microempresas comunitarias capaces de generar empleo, arraigo y esperanza.