Miles de capitalinos amanecieron este martes con la presencia de un rótulo en contra de las iglesias que asistirán a la marcha convocada para el próximo 16 de agosto.
El enorme cartel fue colocado a la vista de todos, a la altura del puente peatonal, ubicado en las inmediaciones de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), en el bulevar Suyapa de Tegucigalpa.
“¡No al uso político partidario de nuestra fe! Nuestra religión no debe ser usada contra el pueblo”, expresa el mensaje del rótulo, con un tono amenazante y de advertencia.
En el rótulo también aparecen colocando las fotografías del arzobispo de Tegucigalpa, José Vicente Nácher, y del pastor Gerardo Irías, presidente de la Confraternidad Evangélica de Honduras, líderes que han alzado la voz a favor de la marcha.
“Fuera traficantes y mercenarios de la fe”, concluye el mensaje, firmado por el "Movimiento Popular Hondureño".
El pasado 8 de agosto, Mario Banegas, presidente de la Asociación de Pastores de Tegucigalpa (APT), denunció públicamente haber sido amenazado por su decisión de participar en la caminata convocada por iglesias evangélicas y católicas.
Para los cristianos, esto representa una amenaza en contra de su buena acción, sin embargo, siguen motivando el evento y haciendo un llamado público a la población.
La caminata está programada para el sábado 16 de agosto y es impulsada por la Confraternidad Evangélica de Honduras y la Conferencia Episcopal de Honduras.
La actividad, de carácter familiar, busca reunir a la población para orar por la paz y la democracia del país, en un contexto de creciente incertidumbre nacional.