San Pedro Sula, Honduras.
Tres niños fueron rescatados en las últimas horas en Honduras, víctimas de trata de personas, con lo que la cifra de menores salvados alcanza 50 en lo que va del año, según informó la comisionada de la Comisión Interinstitucional Contra la Explotación Sexual Comercial y Trata de Personas (Cicesct), Sua Martínez.
Las víctimas rescatadas tienen edades que oscilan entre seis y 16 años, rango en el que los menores son más vulnerables a distintos tipos de explotación; el 90% de las víctimas corresponden a población infantil y adolescente.
El rescate fue posible gracias a la coordinación de diversas instituciones, entre ellas la Dirección Policial de Investigaciones, la Agencia Técnica de Investigación Criminal, el Ministerio Público y otras entidades.
Martínez explicó que las bandas criminales utilizan engaños, chantajes, ciberdelitos sexuales y ofertas fraudulentas de trabajo para atraer a sus víctimas. Algunas de estas acciones ocurren incluso dentro del hogar, donde los niños confían en familiares cercanos, lo que hace que el 95% de las vulneraciones de derechos se produzcan en la intimidad familiar.
“La mayor parte de los abusos ocurre en lugares donde los niños creen estar seguros, como con sus padres, tíos o abuelos. Por eso es vital que los adultos estén atentos a señales de alerta: si un niño no quiere ir a casa de un familiar o actúa con miedo, hay que prestar atención y denunciar”, advirtió Martínez.
La Cicesct presentó un balance de resultados entre 2022 y el primer semestre de 2025, destacando avances significativos en persecución del delito, prevención, cooperación interinstitucional y protección de víctimas.
Durante este período se atendió a 256 nuevas víctimas, mientras que se dio seguimiento a 1,426 víctimas de años anteriores y a 8,102 víctimas indirectas, reflejando la amplitud de la problemática en todo el país.
Los departamentos con mayor registro de sobrevivientes rescatadas fueron Francisco Morazán (30%), Cortés (27%) e Islas de la Bahía (15%), principalmente por delitos relacionados con explotación sexual y trata de personas.
Los tipos de explotación frecuentes incluyeron servidumbre, matrimonio forzado, mendicidad forzada, explotación sexual, adopción irregular, pornografía infantil y trabajo forzado. Entre las víctimas, 88 eran niños, 122 niñas, 40 hombres, cinco mujeres y tres personas LGBTIQ+, además de casos procedentes de Colombia, Nicaragua, México y Estados Unidos.
La denuncia de estos delitos se canalizó a través de los organismos competentes, permitiendo identificar y proteger a las víctimas desde su rescate, con especial atención a personas menores de edad o en situación de vulnerabilidad.
Entre 2022 y 2024, la Cicesct reportó 414 requerimientos fiscales, 673 personas acusadas, 145 sentencias, 214 imputados con sentencia y 627 operativos realizados. Además, se capacitaron 9,832 personas en temas de prevención y sensibilización sobre trata de personas y explotación sexual comercial.
Entre 2023 y el primer semestre de 2025 se crearon, reactivaron y fortalecieron 96 comités locales en todo el país, según lo estipula el artículo 38 del Reglamento de la Ley contra la Trata de Personas. Estos comités funcionan como representantes locales de instituciones gubernamentales y no gubernamentales, facilitando la atención a víctimas y la difusión de canales de denuncia.