El joven Brady Arcel Colindres Irías, de 27 años, fue hallado sin vida en las aguas del río Hondo, a la altura del kilómetro 25 de la carretera que conduce de Tegucigalpa hacia Olancho, luego de haber sido secuestrado por criminales que exigían un rescate de 30 mil lempiras.
De acuerdo con información preliminar, Colindres Irías fue privado de su libertad días atrás, y sus captores utilizaron su propio teléfono para comunicarse con la familia y solicitar el dinero.
Sin embargo, los parientes no lograron reunir la suma exigida, situación que habría provocado que los delincuentes le quitaran la vida de forma brutal.
El cuerpo fue encontrado este miércoles por personas que transitaban por la zona y alertaron a las autoridades, quienes acordonaron el área mientras equipos forenses realizaban el levantamiento correspondiente.
Elementos de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) y del Ministerio Público ya iniciaron las pesquisas para identificar y capturar a los responsables del crimen.
Vecinos del sector lamentaron el hecho y denunciaron que los casos de secuestros y desapariciones se han incrementado en los últimos meses en zonas rurales y periféricas de la capital.