Una operación ejecutada por la Dirección Nacional de Servicios Policiales Fronterizos (DNSPF) terminó con el decomiso de 44 kilos de presunto clorhidrato de cocaína, que eran transportados ocultos en un compartimento falso de la paila de un pickup.
El hallazgo se produjo en la CA-4, a la altura del municipio de San Marcos, Santa Bárbara, donde agentes fronterizos detectaron un automotor sospechoso.
Al percatarse de la presencia policial, el conductor abandonó el vehículo y emprendió la huida, logrando escapar hacia una zona boscosa.
Gracias a la rápida acción de la DNSPF y del Grupo de Operaciones Especiales Tácticas (GOET), el vehículo fue asegurado y trasladado al Punto de Control Interno de Ceibita Norte, Quimistán, para realizar una inspección exhaustiva.
Durante la revisión, la Unidad Canina K-9 alertó sobre la presencia de sustancias en los paneles traseros. Con apoyo de un escáner móvil, se confirmaron bultos sospechosos en la estructura de la paila.
Al abrir el compartimento, los agentes hallaron 44 paquetes envueltos en cinta plástica, marcados con la inscripción “PELOTU”, los cuales contenían presuntamente cocaína pura.
El vehículo interceptado es un Toyota DLX, color gris, año 1991, cuyo propietario figura en la boleta de circulación como un ciudadano hondureño originario del municipio de San Nicolás, Copán.
La droga y el automotor fueron remitidos a Medicina Forense y a la Dirección Nacional Policial Antidrogas (DNPA), donde se determinará el peso exacto, tipo y pureza del estupefaciente.
Las autoridades mantienen activa una investigación para ubicar y capturar al conductor prófugo, además de identificar a los integrantes de la estructura criminal responsable del trasiego.
La Policía Nacional indicó que esta acción antidrogas representa un nuevo avance en la lucha contra el crimen organizado transnacional que opera en el occidente del país.