Un día después de la celebración del Día del Periodista hondureño, un reconocido comunicador fue atacado a disparos durante la mañana de este jueves tras un supuesto intento de asalto en el departamento de Choluteca, zona sur de Honduras.
Se trata de Ricardo Ávila, de 24 años, quien se conducía en su motocicleta, desde su residencia hacia su centro de trabajo, cuando alrededor de las 5:00 am sujetos armados lo interceptaron para despojarlo de sus pertenencias y le dispararon, dejándolo herido en un sector del municipio de Marcovia, Choluteca.
Al lugar de los hechos llegaron unidades del cuerpo de Bomberos y Cruz Roja para trasladar a Ávila a un centro asistencial, donde se debate entre la vida y la muerte, producto de los impactos de bala recibidos en su cuerpo, uno de ellos en su cráneo.
Ávila es un conocido reportero y camarógrafo en la zona sur del país. Actualmente, labora para el medio local Metro TV. El ataque contra el comunicador ocurre un día después de la celebración del Día del Periodista en Honduras, país que, según organismos nacionales e internacionales, es uno de los más peligrosos para ejercer la labor periodística.
Honduras, terreno hostil para ejercer el periodismo
De acuerdo a cifras del Comisionado Nacional de los Derechos Humanos en Honduras (Conadeh), entre 2001 y 2022, en el país han muerto de manera violenta al menos 92 personas ligadas a los medios de comunicación, entre periodistas, comunicadores sociales y propietarios.
De los 92 casos de muertes violentas de comunicadores, el 91 % ha quedado impune hasta ahora, indicó el organismo hondureño en un comunicado. En lo que va de 2022, el organismo de derechos humanos registra la muerte violenta de un periodista y dos comunicadores sociales.
Los departamentos de Francisco Morazán (centro), Cortés y Yoro (norte), Atlántida (caribe), Copán (occidente) y Olancho (oriente) son las seis regiones que en los últimos años registraron los índices más altos de asesinatos de personas ligadas a los medios de comunicación, añadió el organismo.
En el período de referencia, 20 personas vinculadas a los medios de comunicación fueron asesinadas en Francisco Morazán y 20 en Cortés, mientras Yoro, Atlántida y Copán registraron 8 muertes cada uno, y Olancho siete, según el informe del Comisionado.
