La jueza de letras penal con jurisdicción nacional que conoce la causa contra el supuesto jefe de la Pandilla 18, Víctor Samuel Cáceres Cerrato, por el asesinato de los dos estudiantes del Intae, Bryan Josué Núñez Pineda y Luis Eduardo Cardona Miranda, le dictó auto de formal procesamiento con prisión preventiva.
El imputado también enfrenta tres cargos más, uno de ellos es tentativa de asesinato en perjuicio de otro estudiante que se salvó morir en el ataque a sus compañeros al resultar herido y que sobrevivió, haciéndose pasar como fallecido.
Los otros delitos que le imputan a Víctor Samuel Cáceres Cerrato, alias Little Samurái, son robo con violencia e intimidación agravada y asociación para delinquir. El robo es en perjuicio de uno de los colegiales que mataron los pandilleros a quien despojaron de una motocicleta y la asociación para delinquir es en perjuicio de los derechos fundamentales.
Gozaba de libertad condicional otorgada por juez
En la carga probatoria presentada por el Ministerio Público ante el juzgado que conoce la causa se establece que la base de datos policiales y antecedentes sitúan al encausado y a los otros dos pandilleros que guardan prisión por el asesinato como miembros de la estructura criminal Pandilla 18.
El Ministerio Público también acreditó que Cáceres Cerrato tiene una condena por el delito de extorsión dictada en el año 2020 y el juzgado de ejecución le otorgó el beneficio de libertad condicional y aprovechando ese privilegio andaba delinquiendo y mató con seis pandilleros más a los dos estudiantes en la colonia La Pradera el 25 de julio de 2025.
Por el asesinato de los colegiales también guardan prisión otros dos supuestos miembros de la Pandilla 18 identificados como Jostin Jacobo Cálix Coca y José Roberto Alemán Rivera, a quienes el 13 de septiembre se les decretó la medida cautelar de la prisión preventiva.
Las indagaciones de la Policía establecen que Víctor Samuel Cáceres Cerrato fue quien ordenó que privaran de su libertad a los colegiales y dio las indicaciones de cómo y adónde matarlos.
Según las averiguaciones de agentes de la sección de Delitos contra la Vida de la DPI, Cáceres no solo participó en el ataque contra los estudiantes, sino que también planificó el crimen.
La hipótesis de la Policía es que a los colegiales los mataron porque los confundieron con miembros de la Mara Salvatrucha.