La supuesta cómplice de la masacre en la que murieron Said Lobo, hijo del expresidente Porfirio Lobo, y tres jóvenes más asistió a la audiencia inicial este jueves por la mañana.
Se trata de la señora Norma Alicia García, quien fue llevada a los juzgados con Competencia Territorial Nacional para continuar con su proceso judicial.
A las 7:00 de la mañana ingresó la mujer fuertemente custodiada por agentes de la Policía Nacional, con su rostro cubierto con un pasamontañas y esposada de manos.
La mujer, de 58 años, es acusada por el delito de asociación para delinquir y participante a título de cómplice en el delito de asesinato de los cuatro jóvenes a la salida de un bar en el bulevar Morazán la madrugada del pasado 14 de julio.
Por la masacre hay dos personas más que están procesadas, pero García fue la primera contra quien el Ministerio Público (MP) presentó un requerimiento fiscal y fue enviada a la cárcel por un juez luego de la audiencia de declaración de imputado.
La sospechosa fue detenida dentro de una vivienda en la colonia Miraflores Sur. En la casa donde Norma García permanecía, la Fuerza Nacional Antimaras y Pandillas (FNAMP) halló el pick-up que los criminales usaron en la masacre, mismo que tenía orificios de bala y un golpe por el choque con otro automóvil.
La detenida fue remitida por el juez a la Penitenciaría Nacional Femenina de Adaptación Social (PNFAS), misma cárcel en la que guarda prisión la exprimera dama de Honduras, Rosa Elena Bonilla, madre de Said Lobo.
