El cierre temporal del restaurante Catrinas generó una lluvia de reacciones a favor y en contra de la operación de estos negocios en zonas residenciales.
Quedó en evidencia la urgencia de revisar el reglamento de uso de suelo, la Ley de Zonificación Urbana, Paz y Convivencia, el Plan de Arbitrios Municipal y los horarios permitidos.
La directora de Justicia Municipal, María Zanabria, explicó que este caso no es el único. “Actualmente hay 28 denuncias que se están evacuando por el mismo problema”.
Las denuncias que más se reciben son la de operar fuera de horario, no contar con el permiso de operación correspondiente y la contaminación sónica, explicó la profesional del derecho.
Ayer, la Asociación para el Desarrollo Comunitario (ADC), organización de patronatos de la zona noroeste de San Pedro Sula, respaldó a la Municipalidad en la gestión de hacer prevalecer las reglamentaciones donde operan negocios de libre esparcimiento en zonas residenciales.
También conminó a la municipalidad a seguir con este trabajo en todas las residenciales de la ciudad donde operan bares y restaurantes.
Datos
- 7 días permanecerá cerrado el restaurante Catrinas, según la orden municipal, y si se vuelve a repetir el hecho se cerrará definitivamente.
- 500 lempiras es lo máximo de multa que se aplica a los negocios por contaminación sónica la primera vez que son requeridos, luego procede el cierre.
A través del pronunciamiento la asociación explica que los negocios de libre esparcimiento establecidos en áreas residenciales ofrecen como parte de suactividad, diversión musical y estas en muchos casos, a niveles tan altos que atentan contra la integridad psíquica de las personas y en especial de los niños y adultos mayores.
Son 18 colonias, entre ellas Jardines del Valle, Villas del Sol, Villas Mackey y las ubicadas en el sector noroeste que enfrentan problemas similares como en el barrio Río de Piedras.
“Que la Ley de Policía y Convivencia Social y el Plan de Arbitrios establecen los niveles de sonido aceptables para el funcionamiento de estos negocios dentro del municipio en el sentido de proteger a las familias que viven cerca de los mismos. Y de esa manera estos establecimientos no alteren latranquilidad y la paz en sus hogares”, dice la asociación.
Supervisión
El director de Urbanismo, Carlos Alvarado, explicó que Río de Piedras es una zona de uso mixto, lo que significa que se puede combinar negocios con viviendas, pero, hay condicionantes para operar.
“Pueden vender comidas y bebidas, vemos que hay cantidad de restaurantes en la zona, pero no se puede hacer contaminación sónica, hay horarios y reglamentos”.
Aseguró que se está haciendo una revisión de la ordenanza de zonificación y planificación urbana porque existen incongruencias en la actividad que se hace y la zonificación, dijo el arquitecto.
Hay que tomar en cuenta que la ciudad crece y hay reglamentos que deben cumplirse en resumen los negocios tienen que apegarse a las actividades que ellos mismos establecen en los permisos de operación.
“Apoyamos a los emprendedores, pero también la paz y tranquilidad”
San Pedro Sula. “Como alcalde de esta hermosa ciudad, quiero pedirle a todas las zonas residenciales donde haya bares, discotecas, karaokes o lugares que causen incomodidad para que usted concilie su sueño y pueda dormir, pueda trabajar; a que procedan a recoger firmas entre los vecinos y vengan a Justicia Municipal para que procedamos de inmediato a que se respete la Ley de Paz y Convivencia”, dijo el alcalde Roberto Contreras.
“Actualmente nuestra administración no está persiguiendo a ningún emprendedor, queremos que todos salgamos adelante; pero no puede ser que el hecho de que yo quiera ganarme la vida honradamente, deje sin sueño a los niños que quieren ir a la escuela al día siguiente”, dijo.
“Es el momento que ustedes, ciudadanos de áreas residenciales o mixtos donde se irrespetan los derechos, denuncien”.
“Estamos para apoyar a los emprendedores como municipalidad, pero también para apoyar a los ciudadanos para que no pierdan su paz, no pierdan su tranquilidad y puedan tener las horas de sueño y tranquilidad en las casas que compraron con tanto esfuerzo y que ahora las están perdiendo”, añadió.
