Con una explosión de color, alegría y entusiasmo juvenil, el instituto José Trinidad Reyes (JTR) celebró el Día del Estudiante, una de las fechas más esperadas por su comunidad académica.
La actividad reunió a más de mil alumnos en su jornada diurna, quienes disfrutaron de un ambiente cargado de música, expresiones artísticas, concursos, gastronomía típica y compañerismo, haciendo de este día una verdadera fiesta de integración estudiantil.
Como cada año, esta institución educativa, fundada en honor al prócer hondureño José Trinidad Reyes y con una larga trayectoria formando generaciones en la zona norte del país se propuso organizar una jornada inolvidable.
La planificación, que tomó semanas de preparación, involucró activamente a docentes, padres de familia, personal administrativo y, por supuesto, a los propios alumnos, quienes fueron los protagonistas y organizadores de muchas de las actividades.
Una tradición que fortalece la identidad estudiantil
La celebración del Día del Estudiante en el JTR se ha consolidado como una tradición institucional que va más allá de la recreación. Se trata de una jornada que busca reconocer el papel fundamental de los jóvenes en la sociedad, fortalecer su sentido de pertenencia y fomentar una cultura escolar positiva.
Cada sección del instituto se organizó para participar con diferentes propuestas, desde presentaciones artísticas como bailes folclóricos, obras teatrales y conciertos en vivo, hasta competencias de talentos, concursos y ferias gastronómicas.
“Este es un día que los estudiantes esperan con ilusión, es una oportunidad para compartir, salir de la rutina académica y expresar quiénes son. Los maestros los acompañamos, no solo como guías, sino como aliados en su proceso de formación integral”, afirmó el profesor David Ríos.
El instituto José Trinidad Reyes es consciente de que la educación va más allá del aula, bajo ese principio, promueve eventos como este para contribuir al desarrollo emocional, social y cultural de sus estudiantes. La convivencia sana, el trabajo en equipo y la responsabilidad compartida son valores que se refuerzan durante estas actividades.
“Organizar todo esto requiere esfuerzo, pero vale la pena, verlos felices, comprometidos y participando activamente demuestra que estas celebraciones impactan de manera positiva en su formación. Muchos de estos recuerdos los acompañarán toda la vida”, añadió Ríos.
Desde la perspectiva de los estudiantes, el evento también representa un reconocimiento a su esfuerzo diario. Ana Martínez, alumna de décimo grado, comentó, “a veces la carga académica puede ser abrumadora, pero este día nos recuerda que también es importante disfrutar, reír y valorar lo que compartimos con nuestros compañeros. Me sentí muy orgullosa de ser parte de esta comunidad”.
El instituto José Trinidad Reyes no solo se distingue por su excelencia académica, sino también por su compromiso con la formación de ciudadanos íntegros, críticos y comprometidos con su entorno. Fundado hace más de medio siglo, el instituto ha sido cuna de destacados profesionales hondureños y mantiene una fuerte presencia en el ámbito educativo nacional.
Esta celebración es reflejo de una visión educativa que entiende que el aprendizaje también ocurre en espacios de recreación, arte y expresión. Los organizadores destacaron que estas actividades están alineadas con el currículo educativo, en tanto fortalecen habilidades blandas como la comunicación, la empatía, la organización y el liderazgo.
