Las intensas lluvias registradas durante el pasado fin de semana provocaron filtraciones en algunas áreas del hospital Mario Catarino Rivas, uno de los principales centros hospitalarios de referencia del norte de Honduras.
La situación encendió las alertas entre el personal médico y administrativo, quienes actuaron con rapidez para evitar mayores afectaciones en los servicios críticos.
El doctor Gabriel Paredes, director del hospital, confirmó que una de las zonas más afectadas fue la Central de Equipos, espacio esencial donde se lleva a cabo la esterilización del instrumental quirúrgico.
A pesar de la filtración, las cirugías de emergencia no se vieron interrumpidas; sin embargo, algunas intervenciones electivas fueron reprogramadas como medida preventiva.
“Lo que sucedió fue que debido a la gran cantidad de agua lluvia se dañó el cielo falso, como resultado de la humedad que se filtró a través de la tubería de un sistema de aire acondicionado. El techo original es de loza, pero sobre esa estructura se construyó un segundo techo con un sistema de desagüe. Lastimosamente, personas arrojan basura en esa zona, lo que causó un taponamiento del drenaje y provocó el colapso”, explicó el galeno.
A pesar de lo ocurrido, Paredes aseguró que ningún equipo médico fue dañado y que el personal que labora en el área no resultó afectado físicamente. Añadió que se están tomando acciones inmediatas para la reparación de los daños estructurales y para reforzar el mantenimiento preventivo del edificio.
El hospital Mario Catarino Rivas ha enfrentado durante años retos significativos relacionados con su infraestructura, la cual data de varias décadas atrás.
Las deficiencias estructurales, sumadas al alto volumen de pacientes que atiende diariamente, representan una presión constante para sus instalaciones.
Expertos en infraestructura hospitalaria han señalado que muchas áreas del edificio requieren una intervención integral, ya que los sistemas de drenaje y techado han quedado obsoletos frente al aumento de las lluvias producto del cambio climático.
“Ya se están haciendo las gestiones para la reparación del techo, y paralelamente se reforzarán los canales para evitar nuevas obstrucciones. Necesitamos también la colaboración de la ciudadanía. No se puede permitir que se sigan lanzando desechos que terminan obstruyendo los drenajes y causando este tipo de emergencias”, puntualizó el director.
Llamado a la conciencia ciudadana
El director del hospital hizo un llamado urgente a la población para evitar prácticas que contribuyen al deterioro de las instalaciones médicas, como el mal manejo de los desechos en las zonas aledañas.
“La salud es responsabilidad de todos y lo que afecta al hospital, termina afectando a miles de personas que necesitan atención médica. Estamos comprometidos en brindar servicios de calidad, pero necesitamos un entorno seguro y limpio para hacerlo posible”, expresó uno de los médicos del hospital.
El hospital Mario Catarino Rivas brinda atención a pacientes de todo el norte del país, incluyendo los departamentos de Cortés, Yoro, Atlántida, Colón y parte de Olancho, por lo que cualquier alteración en sus operaciones tiene un impacto directo en la red hospitalaria nacional.
