Los dueños de bares, discotecas y restaurantes protestan este lunes contra el toque de queda que impusieron las autoridades de Seguridad desde el 4 de julio en un horario de 11:00 pm a 4:00 am.
Los manifestantes salieron a las 8:00 am desde la Fuente Luminosa y recorrieron toda la 1 calle hasta llegar a la municipalidad sampedrana.
La marcha es acuerpada por el alcalde de San Pedro Sula, Roberto Contreras, quien aseguró que se sumaría a la misma en su condición de emprendedor.
Los propietarios de negocios aseguran que han sido fuertemente afectados y han tenido que cerrar algunos de sus locales debido a las medidas impuestas por el Gobierno Central.
Mencionaron que esta será la primera de más movilizaciones que estarán desarrollando si el Gobierno no opta por tomar otras medidas que no les afecten sus ingresos y los de sus colaboradores.
Ronald Alemán, presidente de la Asociación de Bares y Restaurantes (Asobares), dijo que en el recorrido participan meseros, cocineros, conductores de taxis VIP, músicos, bandas, cantantes independientes y todo el sector que pertenece a la industria del entretenimiento nocturno.
PROPUESTA AL GOBIERNO
Alemán explicó que lo que ellos proponen a las autoridades es sectorizar la restricción para circular, y que esta sea aplicada solo en zonas conflictivas.
Lamentó que a una semana de estar vigente el toque de queda, las pérdidas para los negocios son millonarias y alertó que entre 20,000 y 22,000 empleos están en peligro, entre directos e indirectos.
PÉRDIDAS POR TOQUE DE QUEDA
Las pérdidas en un solo bar o discoteca por estar un mes sin laborar asciende a más de dos millones de lempiras. Diariamente, estos negocios tienen un gasto operacional de hasta 50,000 lempiras. Solo un DJ cobra 5,000 por tocar una noche.
Ya son varios los establecimientos que están cerrando debido a que les es imposible sostener la operatividad y gastos de los establecimientos, pues las pérdidas económicas diarias debido a las restricciones de circulación, son millonarias.
En una discoteca trabajan aproximadamente 60 personas, más los empleos indirectos que se generan de proveedores. A la fecha, todos estos trabajadores se encuentran suspendidos.
