“Como autoridad no podemos permitir que los invasores se apropien de los acuíferos y las zonas de reserva”, reiteró ayer el alcalde sampedrano Roberto Contreras.
“Estas zonas no son negociables, las personas no pueden venir y tomar lo que quieran sin respetar la ley”, insistió el alcalde.
Dato
La Policía Nacional procedió a desalojar a los protestantes, quienes opusieron resistencia. Amenazaron con seguir realizando estas acciones hasta conseguir el objetivo.
La reacción de la máxima autoridad de la ciudad se deriva luego de una protesta con quema de llantas y toma de carretera en el segundo anillo periférico, lo que ocasionó atrasos, congestionamiento y malestar entre los conductores.
El alcalde fue categórico: “Entiendo a los pobladores, pero estamos hablando de zonas de reserva y de un acuífero de donde se extrae agua para los sampedranos. Esto no es un problema nuevo y no es con protestas que se va a resolver. Pondremos orden”, dijo.
Anunció que se procederá a desalojar el cerro Campisa donde se han instalado ya decenas de familias en una zona de reserva natural.
El grupo de protestantes conformado por un centenar de personas hombres y mujeres es el mismo que semanas atrás se tomó un predio privado en el acuífero de Sunseri y fue desalojado por la Policía Nacional pacíficamente.
Días después se colocaron en el bordo de la colonia El Carmen en un sector conocido como La Palizada en derecho de vía y fueron desalojados por la Policía Municipal.
Ayer, el grupo de personas amanecieron protestando en el segundo anillo, se tomaron la calle y dieron a conocer varias demandas a la presidenta Xiomara Castro y al alcalde sampedrano Roberto Contreras.
Los pobladores alegan que se cansaron de ser desalojados y no tener una vivienda digna.
“Nos sacan de todos lados y no nos ayudan, nosotros tenemos derecho a tener una casa”, dijeron a medios de comunicación.
Uno de los protestantes envió un mensaje a la Presidenta para que cumpla su palabra, que un día en campaña política se comprometió con los pobres. “Nosotros hacemos en estas áreas de los ríos, que son legales para vivir, que dicen que son vulnerables e inundables”.
Mientras que al alcalde Contreras le pidieron parar con las acciones y acusaron a los policías de robarles y destruirles lo que ellos tienen. Anunciaron que las tomas seguirán porque están cansados de toda la situación y los abusos.
