24/04/2024
11:38 PM

Daños en El Merendón son similares a los de la biósfera del río plátano

El plan de manejo de la montaña contempla que las comunidades hagan aprovechamiento del suelo, pero el asunto se ha descontrolado y se evidencia en las imágenes del satélite.

San Pedro Sula, Honduras.

Dimensionar el impacto ambiental en El Merendón podría parecer imposible, sin embargo, una herramienta al alcance de todos puede bastar para hacerse una idea de lo que sucede en las cumbres de la cordillera.

A vista de pájaro, y navegando por el satélite que facilita Google Earth es descifrable, hasta para el ojo poco entrenado, lo que está pasando en la montaña. Lo más común es ver enormes áreas de cultivos en ladera.

Allí el bosque desapareció para dar paso a la siembra de hortalizas, flores, café y monocultivos. Aunque la siembra en ladera es lo aconsejable para no afectar el suelo y tener mejor aprovechamiento, ahora estos cultivos se expanden por toda la montaña.

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La biósfera del Río Plátano, una de las más afectadas por la tala, es prioridad en la declaratoria de emergencia ambiental emitida en marzo.

A juicio de expertos de la mesa técnica conformada por autoridades ambientales, municipales y organizaciones que velan por la montaña, la cordillera de El Merendón y sierra de Omoa albergan áreas “irremplazables” que abarcan varios tipos principales de hábitats.

Los impactos son de todo tipo y hasta el narcotráfico hace su presencia. De acuerdo al plan de manejo de El Merendón, en el apartado sobre usos y presiones sobre los valores de conservación, la cacería furtiva es una amenaza que a través del tiempo ha sido invisibilizado por la sociedad civil y por las mismas autoridades.

“En esta práctica se suma también la ingobernabilidad que se vive en las áreas rurales por el empoderamiento de las acciones del narcotráfico, quienes son los principales compradores de fauna como privilegios exóticos y otras organizaciones de antisociales dedicados a la cacería ilegal para compra-venta de fauna ilegal en mercado negro”.

Similitudes con la biósfera de Río Plátano

Esta impresionante cordillera es la homóloga de la Reserva del Hombre y Biósfera del Río Plátano que abarca gran parte del departamento de Gracias a Dios y Olancho, por su grandeza en los aportes en ciencia para el mundo con 18 años de investigación científica, cita el documento para que la cordillera sea declarada zona de emergencia ambiental.

En la actualidad, suma un registro histórico de 146 publicaciones de ciencia a través de Operación Wallacea, que congrega la participación de investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras, Oxford, Cambridge, Toronto, Princeton, Birmingham, Manchester, entre otras.

“Sin embargo, está enfrentando una fragmentación de áreas de bosque natural de manera silenciosa, con la misma dinámica operativa de los infractores que se establecieron en la biósfera del Río Plátano, acciones que se respaldan en los reportes de alta preocupación de Operación Wallacea y los dictámenes técnicos emitidos por el Instituto de Nacional de Conservación Forestal (ICF) en el marco de la FTIA, dado que son las áreas o campamentos de levantamiento de investigación todos los años (desde el 2004-2022)”, cita la petición.