Desde Lamaní, Comayagua, la presidenta Xiomara Castro encabezó este jueves la distribución de 300,000 bonos tecnológicos de postrera para apoyar a pequeños y medianos productores a nivel nacional.
La mandataria hondureña también oficializó la firma de un préstamo por 10 millones de dólares (unos 260 millones de lempiras) con el Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF), fondos que serán destinados a fortalecer el Bono Cafetalero, un programa enfocado en mejorar la producción y calidad del grano.
El financiamiento incluye asistencia técnica, renovación de cafetales, introducción de variedades resistentes a la roya y capacitación en prácticas agroecológicas, con impacto en 15 departamentos del país, incluyendo 10 comunidades pertenecientes a pueblos originarios.
Con esta acción, el gobierno busca impulsar el potencial agrícola nacional, principalmente en los rubros del café y los granos básicos, así como en las actividades de avicultores, porcicultores y ganaderos, sectores priorizados desde el inicio de la actual administración.
Castro explicó que el préstamo con el CAF permitirá poner en marcha el Bono Café 2026, un programa que beneficiará a más de 105,000 familias cafetaleras, con el objetivo de elevar la competitividad del café hondureño en los mercados internacionales.
“Estamos refundando nuestra patria y la estamos cambiando desde la raíz, poniendo en el centro a ustedes y a sus familias”, manifestó la presidenta durante su intervención.
La mandataria agregó que el país apuesta por un café de mayor calidad, resultado de la renovación del parque cafetalero. “Dentro de dos años veremos los resultados, pero se comienza desde ahora, sembrando y apoyando especialmente a nuestros caficultores”, sostuvo.
Además de los bonos tecnológicos, Castro entregó pie de cría de cerdos y gallinas ponedoras a productores de la zona, con el fin de diversificar la producción rural y fortalecer la economía familiar.
Según datos oficiales, más de dos millones de productores han sido beneficiados con diferentes programas agrícolas, lo que representa una inversión superior a los 4,400 millones de lempiras.
Con la entrega de los bonos y el respaldo financiero del CAF, el Ejecutivo busca consolidar la autosuficiencia alimentaria, dinamizar la economía rural y garantizar el bienestar de las familias campesinas, en un contexto en el que el café continúa siendo uno de los pilares de la economía nacional.