Miles de vehículos se desplazarán por las carreteras del occidente del país durante Semana Santa, por lo que instituciones de prevención se preparan para salvaguardar vidas y reducir el número de incidentes durante el asueto.
Carreteras CA-11 y CA-4
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Dos de los tramos en mal estado en la CA-11 se encuentran cerca de Santa Rita. Hay 20 metros de un carril de la vía que está socavado por el río Copán y el otro tramo entre Santa Rita y Copán Ruinas.
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Un tercer tramo en mal estado en la CA-11 está en la comunidad de Río Amarillo, en el puente sobre el río Ututa.
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En el tramo de la CA-4 entre La Entrada y Santa Rosa de Copán, aldea Trincheras, hay resquebrajamiento en las lozas del concreto hidráulico que requieren que los conductores disminuyan la velocidad.
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De Santa Rosa de Copán a Gracias, Lempira, por la carretera CA-11A, la carpeta asfáltica fue reconstruida y se encuentra en estado óptimo.
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De Santa Rosa hasta Cucuyagua, por la carretera CA-4 , la carretera presenta tramos con hundimientos debido a la fallas geológicas.
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Desde Copán hasta Ocotepeque, la carretera CA-4 recibió mantenimiento el año pasado y aunque ya presenta algunos baches, es transitable.
Se prevé que para esta Semana Santa alrededor de 100,000 vehículos circulen por el corredor de occidente en busca de actividades de recreación.
Wendell Torres, subcomisionado regional de Copeco y coordinador del Comité Nacional de Prevención de Movilizaciones Masivas (Conapremm), indicó que previo a la pandemia del covid-19, en occidente se movilizaban entre 100,000 y 150,000 vehículos durante los días de asueto; sin embargo, el año pasado solo se registró una movilización de 40,000 vehículos.
“Sabemos que este año las movilizaciones van a aumentar porque hay una disminución de casos de covid-19 y la mayoría de la población está vacunada, ya se abrieron zonas comerciales y turísticas con toda normalidad, ante ello mucha gente saldrá a vacacionar”.
El corredor de occidente es transitado porque conecta los diferentes destinos del distrito Lenca Maya, es decir, desde Intibucá conecta con Lempira, pasa por Santa Rosa y concluye con Copán Ruinas.
Se han identificado seis tramos que representan peligro para conductores, ya sea porque en algunos hay curvas peligrosas, hundimientos, fallas geológicas y otros por estar en mal estado por baches.
En la zona se instalarán 10 retenes fijos en las carreteras y en cercanías de balnearios.Un punto que representa peligro para los conductores es la zona de San José y Vivistorio, (en la CA-4 entre La Entrada y Santa Rosa.
En esa zona se instalará un retén de socorro de parte de Conapremm.Otro punto que se instalará fijo será en la intersección que conduce de Copán a Lempira, para recomendaciones a los ciudadanos, sobre todo si circulan a Ocotepeque.
