Al periodista Esdras Amado López lo capturaron ayer durante un operativo policial de gran magnitud, tras una denuncia presentada por su esposa Milagro González.
Se espera que este miércoles se presente un requerimiento fiscal en su contra por los delitos de lesiones y violencia intrafamiliar. Anoche los trasladaron a una clínica privada por problemas de salud.
López, conocido por ser un crítico ferviente del Gobierno actual, fue esposado tras un allanamiento que duró más de una hora en la colonia Tepeyac de Tegucigalpa. Durante el operativo, llevado a cabo por agentes de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), el periodista se comunicó con el canal Hable Como Habla (HCH) para denunciar lo que calificó como un complot policial en su contra”.
“Yo no soy narcotraficante, a mí no me han grabado en un narcovideo. Están allanando mi casa una vez más, como en 2009, yo no puedo y no confío en esta Policía”, declaró López.
A medida avanzaban los minutos, más efectivos de la DPI arribaron a la vivienda del exdiputado de Libertad y Refundación (Libre) y él continuaba arremetiendo contra el Gobierno. “Soy un periodista que confronta al régimen, que entren, esta es una persecución periodística”, sostuvo. “Diez policías y van a ver cómo se va a exhibir. No voy a salir a entregarme a un Estado que no es garantista de mi seguridad. Prefiero que me maten aquí adentro”, sentenció.
Mientras tanto, los agentes de la DPI con un megáfono en mano le advertían que debía abrir para ser aprehendido; no obstante, López se negaba a abrir de forma voluntaria, por lo que los fiscales y policías-en tiempo récord- consiguieron una orden de allanamiento para abrir forzosamente la vivienda del periodista.
La llamada con HCH se mantenía en línea y en sus últimas intervenciones les dijo a los policías: “Si quieren usar la fuerza, sáquenme”. “Yo voy a salir hasta que me maten. Voy a salir en cuatro tablas, porque no me voy a prestar a un show del Gobierno. Monten las carabinas y sáquenme”, aseguró.
Manifestó: “Procedan, en este momento me abro el pecho y péguenme los tiros; quien tenga el valor, pégueme los tiros en el pecho”. A pesar de su resistencia, finalmente fue capturado a las 11:05 am. Salió de la casa y levantó las manos con las esposas puestas y fue subido a un vehículo de la DPI.

La denuncia
Milagros González Zelaya denunció ante las autoridades que el incidente ocurrió el lunes 24 de marzo a las 12:30 pm en las instalaciones del Canal 36.
“Me encontraba en la oficina porque él me iba a entregar unos documentos de Política Limpia, pero antes de hacerlo quería que le firmara unos papeles a la fuerza”, relató González Zelaya.
“Me mencionó que no me iba a dar los documentos porque se le vencía el plazo para entregar el informe, al verme en necesidad de dichos documentos me dispuse a firmar, no realizando la firma que comúnmente uso.
Él se percató de mi firma, me exigió que le colocara mi huella; en ese momento él dio la vuelta y le dije: ‘Esdras, ocupo los documentos para el informe’.
Tomé los documentos y al momento de ir por la puerta de la oficina él me haló el cabello, dejándome caer y estrellando mi rostro contra el piso”.
De acuerdo con el relato de González, la agresión hizo “que se me quebraran dos dientes y se me lastimaran los labios. Luego él estuvo forcejeando para retenerme, sujetando fuertemente mis brazos y cuello”.
En medio de la confrontación, Milagros asegura que su esposo se detuvo al notar la gravedad de sus lesiones. “Llamó a su hijo Esdras Ariel López García, pero él no hizo nada para socorrerme”, mencionó. Desesperada, corrió al baño en busca de su hija, sin recibir asistencia por parte de nadie dentro del edificio.