El comercio hondureño resiente el impacto de la guerra comercial entre China y Estados Unidos, situación que ha afectado tanto a consumidores como a emprendedores que dependen del comercio digital. Muchos de ellos esperan que los costos vuelvan pronto a la normalidad.
Estados Unidos, bajo la administración de Donald Trump, impuso aranceles del 145% a las importaciones procedentes de China y un impuesto mínimo del 10% a productos de otros países. En respuesta, China aplicó un arancel del 125% a los productos estadounidenses que ingresan a su territorio.
Recientemente, ambos países acordaron una tregua de 90 días. Durante este periodo, China reducirá los aranceles a productos estadounidenses del 125 % al 10 %, y Estados Unidos bajará los impuestos a las importaciones chinas del 145 % al 30 %.
Aunque no existen cifras oficiales, expertos afirman que miles de hondureños dedicados al comercio menor y mayor se han visto afectados. Esto incluye a quienes compran directamente para revender y a intermediarios que utilizan plataformas como Shein y Temu, conocidas por ofrecer productos a precios accesibles.
Emprendedores hondureños son afectados
Sheyla Hernández, quien actúa como intermediaria en compras por Shein para más de 30 clientes en Honduras, explicó que los aumentos en los precios han desmotivado a muchos consumidores. “Hemos visto reflejados los aumentos de precios en la aplicación. Todo subió. Un par de sandalias que antes costaban 20 dólares, ahora están entre 30 y 34 dólares”, detalló.
Además, Shein eliminó los envíos gratuitos para compras superiores a 150 dólares desde China a Estados Unidos y restringió los bonos de descuento en su aplicación. “Nuestra ganancia eran los descuentos”, añadió Hernández.
Carlos Medina, quien también importa productos para reventa como segundo ingreso, señaló que los costos se dispararon. “En abril se vio un incremento de un 5 %, pero en el último pedido de mayo, cada prenda aumentó al menos 20 dólares. Antes la diferencia era mínima; ahora es de 10, 12 y hasta 20 dólares”, comentó.
Este fenómeno ha sido más evidente en Shein, mientras que otras plataformas como Temu y AliExpress no han registrado incrementos similares.
Empresas de transporte resienten la guerra comercial
La guerra comercial también ha afectado a empresas de transporte de carga. Paola Cruz, gerente de ventas de SerCargo Logistics, indicó que el aumento de impuestos en Estados Unidos para productos chinos ha impactado sus operaciones.
“Muchos clientes han reducido sus volúmenes de compra o buscan importar directamente desde China a Honduras para evitar los altos costos”, explicó.
Actualmente, entre el 75 % y 80 % de la paquetería que llega a Honduras proviene de Estados Unidos, mientras que entre el 20 % y 25 % viene de Asia, especialmente de China.
Cruz añadió que, aunque hay una tregua comercial, los aranceles sobre productos chinos siguen siendo altos. Importar directamente a Honduras desde China puede resultar más conveniente, ya que los aranceles locales oscilan entre el 15 % y el 42 %, dependiendo del tipo de mercancía. Esto, junto con menores tiempos de entrega y costos logísticos más bajos, representa una ventaja competitiva.
Entre los artículos más adquiridos por los hondureños figuran ropa, zapatos, accesorios, productos de belleza, cuidado personal y electrónica. Los emprendedores se enfocan principalmente en ropa y calzado para su reventa
Análisis económicos
El economista Ángel Jiménez manifestó que el incremento de los aranceles ha provocado escasez de productos en Estados Unidos y podría inducir a una recesión, producto de esta guerra económica entre ambas naciones.
“Esto nos afecta a nosotros porque no somos un país exportador, todo lo importamos”, señaló Jiménez.
Indicó además que la tregua de 90 días busca mantener el flujo comercial y evitar que los aumentos de costos se trasladen al consumidor final.
“Van a llegar arreglos que satisfagan a ambas partes. Hay un problema grave porque Estados Unidos se volvió dependiente de la importación de bienes de consumo final del mercado chino. China se convirtió en la fábrica del mundo. China solo exporta el 15 % de su producción industrial a Estados Unidos, eso significa que podría sobrevivir por un tiempo sin ese mercado. El más afectado es el consumidor estadounidense”, explicó.