Aunque prometieron generar condiciones para crear empleos durante la campaña política, los aspirantes presidenciales de los tres partidos políticos no presentaron un plan o estrategia para atacar el problema de la población de jóvenes que no estudian ni trabajan, conocidos como ninis.
Según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), Honduras es el segundo país de América Latina con el porcentaje de población juvenil más afectado (27.4%), solo superado por Guatemala (28.8%).
Ese dato coloca al país en una posición alarmante frente a la región, con impactos directos en la economía, la seguridad y la cohesión social, pues la población de jóvenes en Honduras de 15 a 24 años es de aproximadamente 1.9 millones y de esa cantidad más de 500,000 son ninis.
Los aspirantes a la presidencia han reiterado que la creación de empleo impulsará oportunidades para la juventud, pero ninguno ha presentado un plan que aborde la raíz del problema: la falta de acceso a educación, la débil conexión entre formación y mercado laboral y la deserción escolar siguen sin recibir una propuesta integral.
Humberto Rivera, asesor de la Asociación Nacional de la Micro y Pequeña Industria de Honduras (Anmpih), dice que “ninguno de los tres candidatos presentó o estrategia contra este problema, a pesar de que organismos internacionales lo han identificado como tal, y hasta le llaman ninis”.
“Los candidatos a la presidencia hablan de generación de empleo, de atraer inversión y aspectos generales, pero han ofrecido una propuesta específica. Por ejemplo, con empleo por hora regulado y vigilado (para evitar abusos de patronos) podrían ayudar a estos jóvenes para que tengan tiempo para trabajar y estudiar como ocurre en países desarrollos, pero es difícil escuchar esto, porque ni a la pequeña empresa le ofrecen un plan de estímulos claros para crecer”, dice.
Rivera le dijo a Diario La Prensa “debido a que el país no ofrece condiciones económicas a este segmento de la población, muchos jóvenes se convierten en Titokers, influencers, buscan la forma de ganarse la vida, pero otros quizás se dedican a actividades ilícitas y esto al final afecta gravemente a la sociedad en general”.
Mientras los candidatos evitan profundizar en este tema, los jóvenes reclaman espacios de participación para aportar soluciones, solicitan iniciativas que combinen formación, empleo temporal y emprendimiento, especialmente en municipios con altos niveles de pobreza y migración.
La Organización Internacinal del Trabajo (OIT), después de realizar investigaciones, ha advertido "que la rápida evolución tecnológica exige la adquisición de nuevas habilidades digitales y soft skills, lo que representa un desafío para muchos jóvenes (...), estas nuevas dinámicas laborales generan exclusión entre aquellos que no cuentan con acceso estable a internet, aparatos tecnológicos y educación digital".
Sociológos y líderes comunitarios consultados por LA PRENSA advierten que el fenómeno nini genera riesgos adicionales, como mayor vulnerabilidad ante estructuras criminales y presión migratoria; la falta de oportunidades productivas coloca a la juventud en un escenario de incertidumbre que repercute en la estabilidad del país.
Señalan que Honduras necesita un plan nacional de transición educativa y laboral que incluya metas cuantificables, financiamiento claro y coordinación entre instituciones. Plantean que sin un programa o estrategia integral y específica, cualquier promesa de empleo quedará desconectada de la realidad juvenil.
Melania Reyes, coordinadora de la organización Movimiento de Mujeres de la Colonia López Arellano y Aledañas (Momucla), ejemplifica que en Choloma, el tercer municipio más poblado, "muchos jóvenes quieren salir adelante, quieren trabajar y estudiar, pero no pueden porque sus padres y madres no tienen empleo".
"Este es un problema estructural que los aspirantes a la Presidencia no lo han visto. Ellos hacen propuestas de manera generalizada, pero no dicen cómo y a quiénes ayudarán. Lamentablemente, esta población sigue creciendo y ahora se suma la gente que voluntariamente está viniendo de Estados Unidos por las políticas de Donald Trump. El problema de los ninis es crítico y nosotros lo vemos en nuestras comunidades", dice.
Este 30 de noviembre, más de 6.5 millones de hondureños están llamados a ejercer el sufragio para escoger al próximo presidente, 298 alcaldes y sus corporaciones y 128 diputados del Congreso Nacional.