Este martes se han emitido los primeros adelantos del especial que Wanda Nara ha grabado en París para hablar de su casi divorcio de Mauro Icardi debido a una tercera persona en discordia que no tardó en ser identificada como la actriz Eugenia “La china” Suárez en cuanto salió a la luz la crisis matrimonial de la pareja.
La esposa y representante del futbolista ha explicado que descubrió unos mensajes de una “mujer muy famosa” en su teléfono móvil, tal y como se había afirmado inicialmente.
Aunque en principio no ha querido dar nombres, tampoco ha corregido en ningún momento a su entrevistadora Susana Giménez cuando esta última ha mencionado el nombre de la intérprete en las preguntas que le ha hecho a lo largo de la conversación y que ella ha contestado sin ningún pudor para aclarar, por ejemplo, que las dos mantenían una relación cordial.
También ha desvelado que Eugenia viajó hasta Francia para encontrarse con el jugador del Paris Saint Germain, con quien Wanda tiene dos hijas en común, aunque Wanda admite que hizo mal en enfadarse en un primer momento con ella cuando descubrió esa información porque sabe que la actriz es “una mujer libre” y que no se merecía que la llamara “zo**a destroza familias” en una Stories de Instagram, sin importar que no desvelara su identidad.
“Lo primero que hice fue llamarla y pudimos hablar”, ha desvelado Wanda acerca de lo que hizo en cuanto logró calmarse.
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“Le pedí perdón por esa historia que puse, porque fue un poco dura”, ha añadido para reconocer que su reacción fue “machista”.
Según Wanda, Mauro jura que en realidad no sucedió nada entre Eugenia y él y ella le cree: “Confío en Mauro ciegamente”, ha concluido.
“Si no fuera así, no podría seguir con él, porque mi relación se basa en la confianza. Y siempre creo que en la vida todo pasa por algo”.
