San Pedro Sula, Honduras
Una ingente cantidad de videos creados con inteligencia artificial (IA) ha inundado TikTok en la recta final hacia las elecciones generales del 30 de noviembre en Honduras.
Con rostros, voces y entornos generados digitalmente, estos clips suplantan a periodistas y entrevistados para difundir mensajes políticos que parecen ser reales, pero carecen de cualquier sustento verificable.
El contenido proviene de la cuenta JostrackHN, que acumula más de 102,000 seguidores y 2.2 millones de “me gusta”.
Desde junio de 2025, este perfil ha publicado al menos 62 videos en los que aparecen presentadores, reporteros y supuestos entrevistados inexistentes, que emiten opiniones o noticias falsas sobre el proceso electoral.
LA PRENSA Verifica detectó esta operación de influencia al monitorear de forma sistemática el contenido difundido por la cuenta y analizar los patrones de producción de los clips.
La investigación permitió establecer que se trata de videos sintéticos o deepfakes: materiales creados con IA que imitan la apariencia y la voz de comunicadores y fuentes ficticias para otorgar una apariencia de credibilidad a mensajes engañosos de carácter electoral y político.
Hiperrealismo
El contenido combina escenarios de noticieros con personajes artificiales que hablan con fluidez, sin pausas ni errores, una de las señales típicas de generación sintética, una muestra del hiperrealismo.
El resultado son presentadores casi imposibles de distinguir de una persona real para un usuario promedio, lo que incrementa la capacidad de estos videos para engañar y amplificar mensajes políticos sin sustento.
Uno de los videos sintéticos más virales, publicado el 3 de noviembre, muestra a una falsa periodista anunciando que Estados Unidos analiza un bloqueo económico contra Honduras si la candidata oficialista Rixi Moncada gana las elecciones.
La afirmación es apócrifa: ni el gobierno estadounidense ha emitido tal advertencia ni la política exterior de ese país depende de forma automática del resultado electoral hondureño.
El video superó las 23,000 reproducciones y generó comentarios como “Así es, Nasralla presidente”, “Está serio esto” o “Ellos (EE. UU.) quieren un gobierno corrupto para Honduras”, que refuerzan la desinformación y la interpretan como una confirmación de sus expectativas políticas.
En otro clip, una presentadora generada digitalmente aparece dando el pronóstico del clima y asegura que el 30 de noviembre “habrá inundaciones por tanto ñangara llorando porque perderán las ayudas del Gobierno”, una burla que asocia el clima con una supuesta derrota del partido Libertad y Refundación (Libre).
Este video, publicado el 9 de noviembre, superó las 123,000 visualizaciones y acumuló cientos de comentarios celebrando por adelantado el supuesto resultado electoral, lo que multiplica el alcance del mensaje y su efecto en la conversación pública.
Operatividad
A diferencia de los videos generados con Sora, que incluyen una marca de agua móvil en el centro de los contenidos, las piezas de JostrackHN parecen creadas con Veo 3, una herramienta cuya identificación se coloca en la esquina inferior del video.
Esto facilita que los usuarios recorten el cuadro y eliminen cualquier rastro visible de su fabricación con inteligencia artificial.
Los deepfakes o ultrafalsos replican la estética de los medios tradicionales: cabinas de grabación, micrófonos, subtítulos y transiciones de noticiero.
De esa forma, la audiencia percibe los clips como informes periodísticos, cuando en realidad se trata de construcciones sintéticas diseñadas para parecer noticias.
En conjunto, los 62 videos de suplantación registran más de 2.6 millones de visualizaciones, 24,440 compartidos y 6,817 comentarios, cifras que evidencian su enorme capacidad de propagación y el impacto que generan en la conversación digital hondureña.
El presidente del Colegio de Periodistas de Honduras (CPH), Juan Carlos Sierra, advirtió que los contenidos creados con inteligencia artificial tienen un fin político claro: influir en la voluntad del votante.
“Este tipo de contenido no solo desinforma: moldea la forma en que el usuario entiende la realidad y toma decisiones”, valoró.
Explicó que los videos “buscan infundir ideas en el espectador y dirigir su pensamiento hacia el candidato que promueven”, aprovechando la apariencia creíble del formato periodístico.
Agregó que el uso de estos recursos también alimenta el odio y la confrontación, porque “convierten la mentira en emoción y la emoción en voto”, señaló.
Vacío y riesgo
Lester Ramírez, director del Instituto Universitario en Democracia, Paz y Seguridad (Iudpas), el problema radica en que “la ley se ha quedado corta ante la comunicación digital”.
Advirtió que Honduras carece de una instancia institucionalizada que monitoree y alerte sobre contenidos manipulados durante los procesos electorales.
"En México, el Instituto Nacional Electoral cuenta con una unidad de verificación que rastrea propaganda y noticias falsas. Aquí no tenemos nada parecido, y eso vulnera la equidad en la competencia política", explicó.
El investigador sostiene que el fenómeno de los deepfakes “rompe la frontera entre la sátira y la manipulación, pues fabrican periodistas inexistentes que introducen falsedades al debate público”.
Y agregó: “La tecnología está transformando la mentira en discurso político”.
Los videos de JostrackHN exponen un nuevo frente de desinformación en el país: una campaña digital que sustituye la voz del periodismo por la de la inteligencia artificial, fabricando realidades que los hondureños consumen, comparten y terminan creyendo.