San Pedro Sula, Honduras.
El caso de Claudia Castellón, sospechosa de asesinar a su madre a puñaladas y mordidas la mañana del lunes 28 de diciembre, ha causado asombro entre los hondureños.
Los especialistas aseguran que los casos de parricidios no son tan aislados como parece.
Solo en América Latina el 4.97% de los casos de asesinatos son parricidio y es más frecuente en hombres que mujeres, esto significa que más hombres matan a familiares también del sexo masculino.
Pedronel González, psicólogo especialista en problemas de familia, analizó el caso de Castellón.
“Primero se debe aclarar que quien va a dictaminar la patología que padece la parricida debe ser el psiquiatra forense, pero hay perfiles y conductas que son propias de estas personas.
Los estudios revelan que por cada seis hombres parricidas hay una mujer; por lo general, el perfil es el de una persona joven, soltera, desempleada que vive con la víctima y que padece esquizofrenia y además abusa del consumo de drogas y alcohol”.
González añadió que el matricidio, que es lo que sucedió en este caso, es un delito extremo infrecuente y solo se presenta en el 0.68% de todos los parricidios.
“Definitivamente la parricida en cuestión tiene alguna patología psiquiátrica, posiblemente en este caso, partiendo de los que se ha divulgado en los medios, si esta persona tomó antidepresivos la parricida pudo desarrollar una psicosis de tipo bipolar, los antidepresivos con pacientes bipolares no diagnosticados producen una reacción llamada viraje, o sea que los saca de la depresión pero los vuelve maniacos”.
El caso de Claudia Castellón, sospechosa de asesinar a su madre a puñaladas y mordidas la mañana del lunes 28 de diciembre, ha causado asombro entre los hondureños.
Los especialistas aseguran que los casos de parricidios no son tan aislados como parece.
Solo en América Latina el 4.97% de los casos de asesinatos son parricidio y es más frecuente en hombres que mujeres, esto significa que más hombres matan a familiares también del sexo masculino.
Pedronel González, psicólogo especialista en problemas de familia, analizó el caso de Castellón.
“Primero se debe aclarar que quien va a dictaminar la patología que padece la parricida debe ser el psiquiatra forense, pero hay perfiles y conductas que son propias de estas personas.
Los estudios revelan que por cada seis hombres parricidas hay una mujer; por lo general, el perfil es el de una persona joven, soltera, desempleada que vive con la víctima y que padece esquizofrenia y además abusa del consumo de drogas y alcohol”.
González añadió que el matricidio, que es lo que sucedió en este caso, es un delito extremo infrecuente y solo se presenta en el 0.68% de todos los parricidios.
“Definitivamente la parricida en cuestión tiene alguna patología psiquiátrica, posiblemente en este caso, partiendo de los que se ha divulgado en los medios, si esta persona tomó antidepresivos la parricida pudo desarrollar una psicosis de tipo bipolar, los antidepresivos con pacientes bipolares no diagnosticados producen una reacción llamada viraje, o sea que los saca de la depresión pero los vuelve maniacos”.
