Acentuado el flagelo de la extorsión que azota a Honduras, autoridades han montado una megaoperación destinada a desarticular estructuras dedicadas a cometer esos delitos, especialmente contra maras y pandillas.
Ayer, miércoles, fueron detenidos 12 supuestos integrantes de la pandilla Barrio “18” y la Mara Salvatrucha (MS-13), en acciones policiales desplegadas especialmente en San Pedro Sula y Tegucigalpa, las dos principales ciudades del país y las más azotadas por la criminalidad organizada. También se reportaron detenciones en Choluteca y Comayagua.
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La Dirección Policial de Investigaciones (DPI), a través de su portavoz, Cristian Nolasco, detalló que uno de los detenidos sería un salvadoreño, presunto marero que tenía articulado un plan criminal a ejecutar en Honduras.
El detenido fue identificado como Alberto Martínez, de nacionalidad salvadoreña. Este pretendía conformar un grupo extorsionador en Honduras, de acuerdo con el informe descrito por la DPI. Refirieron que Martínez lideraría el grupo criminal contra comerciantes, transportistas y otros pobladores, tras huir de El Salvador como consecuencia del estado de excepción vigente en ese país que ha llevado al Gobierno a arrestar a casi 60,000 miembros de maras y pandillas.
Martínez es, de acuerdo con la DPI, miembro de la MS-13 en El Salvador. Se desconoce si será enviado hacia su país o si enfrentará a la justicia de Honduras.
El “éxodo” de pandilleros y mareros salvadoreños hacia Honduras ha llevado al incremento en hechos delictivos en zonas rurales fronterizas con ese país, especialmente entre los departamentos de Lempira, Intibucá y La Paz. La policía hondureña ha desplegado operativos en esas regiones para contrarrestar el flagelo, sin embargo, el número de criminales huyendo desde El Salvador ha aumentado, de acuerdo con informes de la Secretaría de Seguridad.
A las operaciones en el territorio se ha sumado la Dirección Policial Anti Maras y Pandillas contra el Crimen Organizado (Dipampco). Esto tras el anuncio del Gobierno de Honduras, a través de la presidenta Xiomara Castro, de declarar estado de emergencia.
