Cuatro hombres fueron detenidos este miércoles frente a tribunales materia de Criminalidad Organizada, Medio Ambiente y Corrupción, en la capital.
Los cuatro hombres hicieron el viaje desde el municipio de Silca, en el departamento de Olancho, hasta esta ciudad, con el objetivo de acuerpar a Francisco Abacuc Urraco Herrera, uno de los involucrados en la masacre ocurrida el 30 de junio en Silca.
Investigaciones preliminares de la DPI indican que los ahora detenidos traían bajo amenazas, desde su natal Silca, a una persona para que rindiera testimonio a favor del pariente de estos, Francisco Urraco.
Los familiares de quien servirá de testigo en la audiencia inicial en la causa instruida contra Urraco Herrera pusieron en manifiesto a las autoridades, sobre lo que estaba ocurriendo y hoy en horas de la mañana los cuatro hombres fueron capturados, entre ellos el padre de Francisco Abacuc.
Ahora, esta persona que serviría de testigo a favor del imputado estaría dando su declaración, pero sin tener la presión de atestiguar lo que le presuntamente le habrían obligado.
“Nosotros somos familiares, nosotros no tenemos problemas con nadie, quien representa mi vida y la de mi hijo es Dios", dijo un detenido, quien se identificó como el padre de Urraco Herrera.
"Él es inocente. No debe nada. No tememos", ahondó el hombre. "Él tuvo un accidente. Él no va a pagar lo que no debe", dijo en relación con el hecho por el que es señalado de un triple crimen. Dijo que los otros tres detenidos son sus sobrinos.
El abogado del imputado, Norman Cáceres, señaló que le resulta curioso que “los únicos testigos que acreditan los hechos que vamos a probar, se los llevan detenidos para investigación”.
El caso contra "Chico"
Las víctimas de la masacre fueron Exar Edulfo Paz Murillo, Leda Esperanza Paz Murillo y Ana Cristina Castro Juárez; quienes eran familia del edil de Silca, Olancho, Pablo Paz.
El Ministerio Público acusa a Urraco Herrera por el triple asesinato; igualmente por asesinato en su grado de ejecución de tentativa acabada en perjuicio de testigo protegido y asociación para delinquir en perjuicio de otros derechos fundamentales.
En la operación, se decomisaron teléfonos celulares y cargadores de armas de diferentes calibres.
Las indagaciones del MP describen que el día del crimen, aproximadamente a las 8:00 de la noche, salieron las víctimas junto con el testigo protegido, a bordo de un Ford F150 gris, hacia el Municipio de Talanga, Francisco Morazán.
Tras regresar a la vivienda fueron interceptados por "Chico" y otras personas más a bordo de otro pick-up y una motocicleta montañesa, e inmediatamente comenzaron a dispararles en reiteradas ocasiones hasta dejarlos sin vida, según el MP.