Una hondureña acusada de asesinar a una madre y a su hijo fue capturada en un punto fronterizo de Nicaragua durante las últimas horas.
La detenida, identificada como Ericka Jazmín Manzanares Moreira, de 34 años, enfrenta cargos por la muerte de Iris Judith Zeledón (20), actual pareja de su exesposo, un excandidato a diputado por el Partido Liberal.
La detención de Manzanares Moreira tuvo lugar el miércoles 18 de octubre como resultado de una operación conjunta entre Interpol Honduras y las autoridades nicaragüenses. La acusada, quien había evadido la justicia desde el fatídico incidente, ahora enfrentará el proceso legal correspondiente.
El crimen que conmocionó a la comunidad de Choloma se registró en la residencial Villa Valencia. Iris Judith Zeledón, junto a su bebé, se encontraba en su hogar cuando un grupo de individuos fuertemente armados ingresó y disparó repetidamente contra la mujer y el niño. Trágicamente, ambos perdieron la vida en el acto, dejando consternada a la comunidad.
El crimen
La noche del 24 de junio de 2023 quedará marcada como una fecha trágica para la familia Zeledón y Alcántara, cuando la joven Iris Judith Zeledón y su bebé Aarón perdieron la vida en un doble crimen perpetrado en la residencial Villa Venecia de Choloma, Cortés.
El impacto de esta cruel tragedia trascendió fronteras, llegando hasta Nicaragua, donde reside la madre de la víctima, quien, desgarradoramente, no tuvo la oportunidad de conocer a su nieto.
La historia se remonta apenas 20 días atrás, cuando Iris dio a luz al pequeño Aarón, fruto de su relación con Jacinto Alcántara. Según versiones de allegados, la llegada del bebé habría desatado celos en la ahora sospechosa, Ericka Jazmín Manzanares Moreira, detenida recientemente en un punto fronterizo de Nicaragua gracias a una operación conjunta entre Interpol Honduras y las autoridades nicaragüenses.
El crimen, cometido en la sala de una vivienda bajo un sistema de circuito cerrado en Villa Venecia, ha desconcertado a la comunidad, dado que los asesinos lograron entrar y salir sin ser detectados. El cuerpo de la joven madre quedó sentado en un mueble, sosteniendo entre sus brazos y piernas el pequeño cuerpo inerme de Aarón, una imagen estremecedora que ha consternado a la población hondureña.
La indignación se ha extendido más allá de las fronteras, llegando hasta Nicaragua, donde la familia de Iris recibió la devastadora noticia. La imposibilidad de repatriar los cuerpos ha añadido una capa de sufrimiento a la tragedia, llevando a que la joven madre y su bebé sean sepultados en suelo catracho.
“Nos dijeron que una mujer de nombre Erika es quien pagó para que mataran a mi hermana”, dijo un familiar de la víctima a Diario La Prensa de Nicaragua.
“Todo apunta a que fue la expareja (de Jacinto Esteban Alcántara); ellos se separaron hace unos 2 años. Con mi hija él llevaba 16 meses”, dijo a Radioabcstereo Luz Marina, madre de la nicaragüense.
“Ella (la expareja de Jacinto Esteban Alcántara) ya había amenazado a mi hija, le había dicho que la iba a matar”, agregó la acongojada mujer.
De su lado, Jacinto Alcántara declaró a medios de comunicación este martes: “No soy quien para acusar, pero sí le estoy pidiendo a Dios día y noche que se haga justicia, que sean las autoridades competentes que determinen esa situación. Hay un antecedente, nosotros, en mi relación anterior (con Ericka), habíamos roto nuestro vínculo, manteníamos siempre el vínculo familiar de papá y mamá, ahí toda la información ya la tienen las autoridades competentes”.
Además, aprovechó la oportunidad para pedir la custodia de su hijo de siete años -concebido con Ericka- pues dijo desear estar con él para cuidarlo en medio del conflicto legal que enfrenta su madre tras el crimen de Iris y Aarón.
“Exigimos justicia, también quiero que las autoridades me ayuden a recuperar a mi hijo mayor, ya que está en medio de todo esto y quiero ser un apoyo para él, siempre lo he anhelado”, enfatizó.