La Policía Nacional de Honduras, a través de la Dirección Nacional de Servicios Policiales Fronterizos (DNSPF) y en coordinación con la Oficina Central Nacional de Interpol-Honduras, capturó a un ciudadano hondureño con orden judicial pendiente por el delito de asesinato.
El detenido es un hombre de 24 años, ayudante de albañilería, originario y residente de la colonia Los Castaños, en San Pedro Sula, Cortés.
La detención se llevó a cabo en la aldea Milla 4, municipio de Omoa, Cortés, en la zona fronteriza del norte del país, luego de que el imputado ingresara como retornado desde Estados Unidos en un vuelo procedente de ese país.
Durante el proceso de verificación migratoria, el sistema de alertas automatizadas detectó una orden judicial activa por delitos graves, lo que permitió su identificación y arresto inmediato por parte de los agentes asignados al punto fronterizo.
Los hechos por los cuales es acusado, ocurrieron el 7 de mayo de 2018, en la colonia San Miguel, municipio de Choloma, Cortés.
Según las investigaciones, el imputado, que entonces tenía 17 años, es el principal sospechoso del asesinato de Ingrid Yamileth Vega Sánchez y de intentar asesinar a otra mujer, quien sobrevivió al ataque y actualmente cuenta con estatus de testigo protegida.
De acuerdo con testigos presenciales y pruebas recolectadas en la escena, el agresor habría atacado con violencia a ambas víctimas. Vega Sánchez falleció en el lugar, mientras que la segunda mujer logró sobrevivir.
Por este caso, el Juzgado de Letras de la Niñez y Adolescencia de San Pedro Sula emitió una orden de captura el 11 de agosto de 2023, tras avanzar la investigación y confirmarse elementos suficientes para proceder judicialmente. Anteriormente, el 31 de mayo de 2022, ya se había emitido una orden preliminar de detención, pero el sospechoso se mantenía prófugo.
Luego de su arresto, el imputado fue trasladado bajo custodia policial hasta San Pedro Sula, donde fue remitido a la Fiscalía de Turno del Ministerio Público (MP), a fin de continuar el proceso legal correspondiente. Será puesto a disposición del tribunal competente en materia de niñez y adolescencia.
El asesinato está tipificado en el Código Penal de Honduras como un delito grave, con penas de entre 20 y 25 años de prisión. En casos de tentativa de asesinato, como el que involucra a la segunda víctima, la legislación contempla una reducción de hasta un tercio de la pena si el acto no se consuma.
En este caso, el imputado enfrentará cargos tanto por el asesinato consumado como por la tentativa de homicidio.
