17/04/2024
11:48 AM

A Carlos Calona la violencia le arrebató su movilidad, pero no su espíritu

  • 15 marzo 2023 /

Fue acribillado por unos amigos y vecinos en una parranda y dañaron su columna, hoy hace sillas de ruedas en SPS.

San Pedro Sula

Carlos Arturo Calona Ortiz (52) fue acribillado por unos “amigos” y vecinos, y el daño de esos tiros lo redujo a una silla de ruedas, pero no acabó su creatividad y su espíritu fuerte con el que hoy inspira a otros.

El incidente violento que cambió su vida sucedió hace 18 años mientras departía en un día de vacaciones con sus transgresores. Estos “amigos” , en medio de la parranda, maquinaron traicionarlo para despojarlo de sus pertenencias, y tras darle tres tiros en la cintura y el pecho lo dieron por muerto.

Este ingeniero eléctrico egresado del Centro Universitario Regional del Norte (Curn), hoy la Unah-vs, trabajaba en ese entonces en una empresa privada, pero debido a su inmovilidad cayó en una profunda depresión que casi lo lleva al suicidio.

Es ingeniero eléctrico egresado de la Unah-vs.

El impacto emocional fue durísimo los dos años posteriores al intento de asesinato, pues llevaba una vida muy activa y era una persona muy sociable y servicial; pero el daño que le produjeron quienes un día tuvieron su confianza lo hizo retraerse y ser poco sociable.

Tiempo después, Calona, quien también es técnico en audio por un centro de México, puso una empresa de alquiler de audio y agencia de publicidad.

Una amiga le regaló una silla de ruedas eléctrica y cuando se descompuso, Calona la desarmó, algo que daría paso a una empresa dedicada a la modificación y creación de sillas de ruedas eléctricas y verticalizadores. Esta empresa tiene el nombre de D.C. Technology.

Servicio

Con las ganancias de su empresa D.C. Technology, Calona va a motivar a otras personas con retos especiales en todo el país. Dona dos sillas de ruedas al año para personas desposeídas.

En un principio, el sampedrano abrió un taller en Barandillas, pero luego llegaron extorsionadores. Decidió cerrarlo y fue invitado a Santa Rosa de Copán para ser capacitador con sus conocimientos y desde allá también continuó con sus creaciones.

En ese lugar vivió con unos pastores, los que le pidieron que fuera con ellos a la iglesia y abrazó la fe cristiana. Luego de la pandemia decidió volver a reabrir un taller en SPS y lo asiste su hijo Bryan.

Este ingeniero es ambientalista y utiliza la mayoría de materiales reciclados en sus creaciones. También ha integrado jóvenes en riesgo de su comunidad para enseñarles y alejarlos de las drogas y el alcohol.

A Carlos Calona la violencia le arrebató su movilidad, pero no su espíritu