Un imponente intercambiador, puentes, ampliaciones y una serie de obras se han construido en el bulevar del este, dando fluidez al tráfico.Pero a unos metros del intercambiador de la 33 calle se origina el gran problema.
Frente a Zip Calpules se forma un tremendo congestionamiento provocado por los buses y la falta de control para que las personas que salen y entran al parque industrial aborden las unidades.
El sitio, donde se forma el caos, está a pocos metros de donde funcionó la Dirección de Vialidad y Transporte, encargados de poner orden en estas situaciones.
El recién abierto intercambiador conecta la entrada este de la ciudad con dos importantes bulevares de San Pedro Sula, el del este y el de la 33.
Es una obra de tres niveles ubicado en la intersección entre el bulevar del este y el bulevar de la 33, conectando a la Capital Industrial de Honduras con el litoral por El Progreso, Yoro, y el aeropuerto Ramón Villeda Morales.
El proyecto funciona muy bien y da una imagen diferente a la ciudad, según las impresiones de los viajeros que llegan por el aeropuerto Villeda Morales.
“El problema es notorio y se evidenció. Mientras los empleados estaban de vacaciones no habían buses bajando y subiendo personas y el tráfico era fluido, hoy retornó el problema”, dice Julián Cáceres, conductor de un bus escolar.
Para saber
Afectados denuncian esta situación y piden a las autoridades municipales y al Zip encontrar una solución definitiva.
Y es que a diario son centenares de empleados de la maquila que bajan y suben de los buses, que se estacionan en medio de la calle, causando congestionamiento.
“De nada sirve la megaobra en la entrada si uno se viene a trabar en este sitio”, manifestó Carla Méndez, una sampedrana que recorre el sector casi a diario.No solo es cuando bajan y suben personas.
Los buses se estacionan y hasta se toman los dos carriles dejando, y nadie hace nada porque es un problema viejo que debe resolverse, asegura la comerciante Inés Mendoza.
Los empleados de las maquilas dicen que muchas veces se salvan de ser atropellados y no son culpables de la situación.
“Nosotros venimos a trabajar, y si usted ve no hay ni siquiera un puente peatonal para garantizarnos la seguridad vial”, dijo uno de los trabajadores.
Soluciones
Pero las autoridades aseguran que están al tanto de la situación y ya están trabajando en una opción para que las obras hechas sean funcionales.
“Ya tenemos los planos con Zip Calpules para construir una isla que bajan los empleados de las maquilas viniendo de La Lima a San Pedro Sula.
Ahora, en el carril de San Pedro Sula a La Lima es más complicado y estamos buscando soluciones”, manifestó el alcalde Roberto Contreras.
