22/04/2024
05:16 PM

Tres de cada diez son tratados por depresión en Honduras

A causa de la pandemia han surgido más necesidades de salud mental y pocos recursos para atenderla, puesto que apenas el 2% del presupuesto es destinado.

SAN PEDRO SULA

Familias desintegradas, pobreza, desempleo, delincuencia común y en los últimos dos años una crisis sanitaria que parece no terminar: la población hondureña convive con una infinidad de factores que vulneran su bienestar emocional, psicológico y social.

Tres de cada diez hondureños han sufrido de trastornos psiquiátricos a causa de la pandemia del covid-19, que además de enlutar a las familias ha desencadenado una crisis económica sin precedentes, al punto que el 70% de la población vive en pobreza, según datos del Instituto Nacional de Estadísticas en 2021.

Depresión en el mundo

La depresión es un trastorno del estado de ánimo en donde los sentimientos de tristeza, melancolía o infelicidad interfieren con la vida diaria. Puede ser temporal o permanente y se clasifica en términos de leve, moderada o severa, incidiendo en las tasas de mortalidad y morbilidad. Impacta a personas de todas las edades, con predominancia en adolescentes y personas de la tercera edad. El factor hereditario puede ser causa, pero también factores externos.

5% De la población en el mundo, equivalente a más de 300 millones de personas, sufre de depresión, siendo la primera causa de discapacidad, dice la OMS.

75% De las personas afectadas por depresión en los países de ingresos bajos y medianos, que incluye a Honduras, no reciben tratamiento alguno.

En Honduras existe un desconocimiento significativo sobre la temática de la salud mental y su importancia en la atención de salud general.

Persisten los prejuicios culturales y una estigmatización social de personas buscando ayuda con profesionales e instituciones de salud mental.

Al recurrir al sistema privado, el paciente paga un promedio de 800 lempiras por terapia psicológica y más de 1,500 lempiras por asistencia psiquiátrica, la cual no incluye los fármacos que el profesional pueda recetar para tratar según sea el tipo de trastorno mental.

La necesidad de buscar los servicios privados versa porque se evidencia una ausencia general de recursos dedicados a la salud mental y de servicios adecuados ofrecidos a la población.

En 2019, el país contaba con menos de 50 profesionales de psicología en el sector público, lo cual representa 0.5 psicólogos por cada 100,000 habitantes.

Además, frente a la pandemia ha habido un aumento importante de personas con nuevas condiciones y necesidades de salud mental y pocos profesionales capacitados para atenderlas.

Gran parte de los medicamentos son costeados por los pacientes.

“La depresión es una condición que en cualquier momento puede dar a niños, adolescentes, adultos y adultos mayores, a cada uno de manera diferente. Las circunstancias del ambiente tienen mucho que ver, y es precisamente por eso que ha aumentado mucho la depresión durante la pandemia”, dijo Francia Varela, psicóloga de la Periférica 1 del Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS) en la capital.

Presupuesto

El 1.75% del presupuesto nacional es para servicios de salud mental. De todos los gastos invertidos en salud mental, el 88% está dirigido a hospitales psiquiátricos y el 12% para servicios de salud mental no hospitalarios, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Tal proporción refleja la media de los países de ingresos bajos y medios-bajos, en la cual el gasto gubernamental en salud mental es inferior a un dólar per cápita, mientras que los países de ingresos altos gastan más de $80.

La mayor parte del gasto notificado se asigna a los hospitales mentales en particular, excepto en los países de ingresos altos, en los que menos del 43% del gasto se destina a la salud mental.

Tres de cada diez son tratados por depresión en Honduras

“Muchas personas creen que es un problema de los nervios o que las personas no ponen de su parte para solucionar ciertos conflictos”, dijo Mario Aguilar, subdirector del Hospital Psiquiátrico Mario Mendoza, quien a propósito del Día Mundial de Lucha contra la Depresión recordó que el 30% de la población hondureña es afectada por este trastorno de salud mental.

El profesional de la salud explicó que la mayoría de pacientes atendidos ronda entre los 20 y 49 años, es decir, edades claves para el desarrollo personal.

Aunque en teoría el 100% de la población tiene libre acceso a los medicamentos psicotropos en los hospitales psiquiátricos, no así en los centros de atención primaria , en donde la existencia de tales medicamentos es muy limitada.

Todos los problemas de salud mental están cubiertos en los planes de seguro social, pero con mucha frecuencia el IHSS no dispone de los medicamentos necesarios para el tratamiento de los problemas psiquiátricos, por lo cual el afiliado debe comprarlos.

La mayor parte del presupuesto para salud mental va destinado a los hospitales.

“Gobierno debe implementar dirección de salud mental”

TEGUCIGALPA. De los 4,121 suicidios registrados en el país desde enero de 2010 a diciembre de 2021, ocho de cada 10 correspondieron a hombres, según la Secretaría de Seguridad.

Pese a que la pandemia vulneró la salud mental de millones, en 2019, año anterior al confinamiento, resultó ser el que más suicidios contabilizó en el país: 433, que son 27 más que los 405 de 2020, que a su vez superan por uno a 2018 (404), en un orden de mayor a menor.

El inicio del año, de acuerdo con expertos consultados, es cuando más de estos hechos fatídicos ocurren y, en efecto, los números oficiales colocan a enero, con 403 suicidios, como puntero, con una diferencia de 11 del segundo lugar, abril (392).

Para la Secretaría de Salud, la principal causa de los suicidios es la depresión, con 1,125 casos (27%), casi cuatro veces más que los problemas pasionales, que contabilizan 362 (9%).

El rango de edad en el que ocurren más hechos es de los 20 a 29 años, con 1,245 reportes, seguido de los 30 a 39 años, que tienen 764 reportes, representando en conjunto el 49% del total del registro. En un promedio establecido ocurrió un suicidio diario desde enero de 2010 a diciembre de 2021.

En criterio de Patricia Mackay, docente de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (Unah), es necesario que el Gobierno implemente una dirección de salud mental en cada departamento, recopilación de la estadística y acondicionamiento de los fallidos hospitales móviles para la salud mental.

Según estimados, por cada suicidio registrado son 21 intentos los que existen, cifra que solo es parte del subregistro.

El grupo de población de 20 a 29 años presenta la tasa de suicidio más alta, según de la Secretaría de Seguridad.