San Pedro Sula. La cuenta regresiva para el cambio a una nueva licencia de conducir corre imparable, por lo que este parece un buen momento para hacer un recuento de las cifras y el recorrido que este documento ha tenido a lo largo de la última década.
Un análisis efectuado por la Unidad de Investigación y Datos de LA PRENSA, que comprendió datos de los pasados 12 años, reveló aspectos que podían haberse previsto, pero también algunos resultados inesperados.
La Dirección Nacional de Vialidad y Transporte (DNVT) mantiene unas 20 oficinas regionales por todo el país. LA PRENSA analizó los datos de emisión de licencias desde el año 2010 hasta la primera semana de mayo de 2022.
Cabe aclarar que, aunque este medio solicitó los datos de las dos oficinas regionales de Tegucigalpa, solo recibió la información de una de ellas, por lo que al no contar con la información completa, las cifras aquí presentadas no incluyen a esa importante oficina regional.
Datos
2.7 millones de licencias de conducir se emitieron entre 2010 y mayo de 2022, según datos de la DNVT. Si se incluye Tegucigalpa, la cifra supera los 3 millones.
35% de todas las licencias emitidas en 12 años corresponden a los permisos otorgados en la oficina regional de la DNVT en SPS, sin contar la capital.
48 permisos de conducir otorgó la oficina regional del departamento de La Paz, entre 2010 y 2022, el récord absoluto por la menor cantidad de documentos.
Isleñas, las que más conducen
De acuerdo con los datos proporcionados por la DNVT, la mayor proporción de mujeres conductoras se encuentra en Islas de la Bahía, siendo la oficina regional de Roatán la que registra este dato con una proporción de 23% de licencias emitidas que corresponden a féminas.
Esto significa que, de cada diez conductores que circulan por el departamento insular, entre dos y tres son mujeres.
Otras ciudades que tienen una proporción similar, aunque menor, son San Pedro Sula (20.1%), Santa Rosa de Copán (20.1) y La Ceiba (19.9%).
En el otro extremo de este espectro se encuentran los departamentos de Santa Bárbara y Lempira, que con 10 y 9.9%, respectivamente, se encuentran a la cola, con la menor proporción de mujeres conductoras en Honduras.
El documento más tramitado no arrojó ninguna sorpresa, pues la licencia liviana nacional se confirmó como aquella que más sacan los hondureños a la hora de efectuar este trámite.
De acuerdo con los datos analizados, entre 2010 y los primeros días de mayo de 2022, se tramitaron más de 1.5 millones de esta categoría de licencia, lo que equivale al 59% de los 2.7 millones de licencias tramitadas a lo largo de los últimos 12 años.
La oficina que, en el período analizado, ha emitido más licencias, es la de San Pedro Sula, la cual desde 2010 emitió más de 953,600 permisos de conducir.
Por el contrario, los datos muestran que la menor cantidad se emitió en la oficina regional del departamento de La Paz, con apenas 48 licencias emitidas en 12 años, según los reportes de la DNVT.
Licencias especiales
Inmediatamente después de las livianas nacionales, la segunda mayor cantidad de permisos tramitados corresponde a las licencias del tipo especial, la categoría que tramitan quienes conducen una motocicleta.
A este tipo de licencia corresponde el 28% de todas las licencias tramitadas desde 2010, lo que equivale a más de 743,200 permisos de conducir emitidos en 12 años.
A este respecto, Daniel Gonzáles, director nacional del Centro de Capacitación Vial y Orientación de Conductores, de la DNVT, comentó que al efectuar la comparativa de los que tramitan licencia para vehículo y los que lo hacen para moto, “siempre ha habido un margen bien marcado de las personas que solicitan licencia para motocicleta”.
Esto parece tener especial importancia en últimas fechas, si se toma en cuenta los altos precios de los combustibles en la actualidad.
Ante este panorama un buen número de hondureños han intentado proteger sus economías prescindiendo de sus automóviles y optando por movilizarse en moto.
Eso fue precisamente lo que hizo Mauricio Carrasco, mecánico de oficio a quien las circunstancias motivaron a cambiar su medio de transporte.
“Hemos evitado salir a pasear en carro”, dice Carrasco, y agrega que el uso de su automóvil le suponía un gasto de entre 500 y mil lempiras semanales por el gasto de combustible.
“Por eso me compré una moto, porque me consume menos”, refiere, asegurando que su gasto diario por combustible promedia los 40 lempiras, por lo que poseer una licencia especial le aporta un considerable ahorro de dinero a la hora de transportarse.
Problemas de movilidad
Parte de los problemas de movilidad que se dan en las grandes ciudades no se debe precisamente al incremento del parque vehicular.
En el caso particular de San Pedro Sula, buena parte del problema se debe a una causa específica: los vendedores estacionarios.
“En el centro de la ciudad la movilidad es complicada y es por eso que se arma tremendo tráfico en las horas pico debido a que en algunas vías solo hay habilitado un carril para el paso de vehículos y de ahí podemos ver que el resto de las vías se encuentran llenas de puestos de vendedores”, explica Jimy Barahona, director de Movilidad Urbana de la Municipalidad de San Pedro Sula.
El funcionario se refiere también a otro problema y que se relaciona con aquellos que hacen mal uso de sus permisos para conducir. “El otro gran problema de movilidad es la irresponsabilidad y la poca educación vial que tienen los conductores, donde los camioneros se estacionan donde quieren, los buseros hacen sus paradas donde quieren”.
El llamado de la autoridad es que los conductores hagan un uso responsable del privilegio que les otorgan sus licencias.
Licencias han dejado más de L988 millones en doce años
San Pedro Sula. A lo largo de poco más de una década, los ingresos del Estado por concepto de la emisión de permisos de conducir ascienden a un aproximado a 988,355,580 lempiras.
Si no se toma en cuenta a Tegucigalpa, es la oficina regional de San Pedro Sula, debido al tamaño de su parque vehicular, la que lidera la recaudación. Desde 2010 esta oficina lleva recaudado unos 345.4 millones de lempiras, lo que equivale a poco más de un tercio de la recaudación total (34.9%).
En un más lejano segundo lugar viene la oficina regional de La Ceiba, que durante el período analizado recaudó unos 95.6 millones, mientras que más atrás aún se ubican las de Santa Rosa de Copán y la de Comayagua con 79.9 y 79.5 millones recaudados, respectivamente. Como ya se ha mencionado en este artículo, la oficina regional con menor actividad es la del departamento de La Paz, y esto se refleja en sus cifras de recaudación, pues desde el año 2010 esta oficina apenas ha recaudado, por concepto de emisión de licencias, un poco más de 20,200 lempiras.
