Partido Nacional apunta a exprimir el voto duro y rural para ganar elecciones
El Partido Nacional ganó en el 47% de los municipios rurales en las primarias de 2025, convirtiéndose en la primera fuerza política en estos territorios. El problema es que no pueda superar el techo de un millón de votos
- 12 de noviembre de 2025 a las 15:56 /
El Partido Nacional volvió a levantar la cabeza tras las elecciones primarias. Después del duro golpe que recibió en 2021, cuando perdió la presidencia por casi 15 puntos porcentuales, la organización cerró marzo de 2025 como la fuerza más votada.
Según especialistas, la victoria se cimentó en la movilización de su voto duro, tradicionalmente concentrado en municipios rurales y algunas ciudades de arraigo azul. Pero esa fortaleza puede convertirse en un límite: ¿ha alcanzado ya su techo o podrá crecer en las elecciones generales para dar el triunfo al nacionalista Nasry Asfura?
El partido de la estrella solitaria obtuvo casi 914 mil votos en las primarias de marzo. Esa cifra representa una ventaja de 20 mil votos sobre Libertad y Refundación (Libre, con 894 mil) y de casi 200 mil frente al Partido Liberal (718 mil).
Voto rural
El nacionalismo se distingue por cultivar un voto heredado de generación en generación, casi como un legado familiar, lo que consolida una base electoral especialmente fiel.
Intibucá, Lempira, Choluteca y El Paraíso figuran entre los bastiones históricos del partido fundado por Manuel Bonilla.
914
mil
votos obtuvo en las primeras el Partido Nacional, la fuerza más votada
El dirigente nacionalista Jesús Mejía destacó que su organización mantiene una fuerte penetración en las comunidades rurales, donde logra captar miles de votantes.
“El llamado voto rural lo ha trabajado muy bien el Partido Nacional y eso es lo que le da contundencia en cualquier proceso electoral”, declaró a LA PRENSA Premium. La gran excepción ocurrió en los comicios de 2021, cuando incluso en las zonas rurales se sintió el voto de castigo.
Aun así, en el occidente del país —donde la población se concentra en áreas rurales— el Partido Nacional logró imponerse a Libre, pese a que este último fue el ganador de las elecciones generales.
Mejía también resaltó el mismo comportamiento en Comayagua y Choluteca durante las primarias de este año. Aunque las cabeceras departamentales fueron ganadas por el Partido Liberal, el resto de los municipios terminó inclinando el mapa hacia el azul.
¿Se vota distinto en la zona rural?
El llamado voto rural fue protagonista sorpresivo en las polémicas elecciones de 2017. En el primer corte de resultados, el opositor Salvador Nasralla —hoy nuevamente candidato presidencial— aventajaba por cinco puntos porcentuales al nacionalista Juan Orlando Hernández, quien buscaba la reelección y hoy permanece preso en Estados Unidos por narcotráfico. Días después, Hernández revirtió la tendencia. Los nacionalistas atribuyeron el giro a los votos rurales, que tardan más en ser procesados; la oposición denunció fraude, y diversos organismos independientes señalaron fallas en la seguridad del sistema electoral.
Para comprobar si realmente las zonas rurales del país muestran una inclinación mayor hacia el Partido Nacional, la Unidad de Datos de LA PRENSA Premium analizó los resultados de las primarias de 2025.
De acuerdo con una clasificación basada en estándares de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), 234 de los 298 municipios de Honduras son rurales. En 110 de ellos —el 47%— el Partido Nacional obtuvo mayoría en marzo, más que cualquier otra fuerza política.
Además, el 56% de los votos nacionalistas provino de municipios rurales, en contraste con el 39% del Partido Liberal. Solo Libre muestra un comportamiento similar, con un 54%, señal de que comienza a disputar ese terreno.
La capital, nacionalista
Otro bastión clave para los cachurecos, según Mejía, es el Distrito Central, donde residen 836 mil electores. En las primarias, el Partido Nacional dominó la capital.
56%
de los votos
del Partido Nacional en las primarias provino de los municipios rurales
Tegucigalpa fue símbolo del desplome nacionalista en 2021: perdieron la presidencia y también la alcaldía, después de haber ganado 9 de 10 procesos municipales en la era democrática moderna, lo que abrió paso a la administración de Jorge Aldana (Libre).
Por parte parte, Mejía reconoció que en Cortés —el departamento con mayor peso electoral— el Partido Liberal mantiene la delantera, por lo que ve difícil que el nacionalismo pueda superarlo.
Con miras a los próximos comicios, el Partido Nacional se ha propuesto alcanzar por lo menos 1.5 millones de votos.
“En las generales esperamos una participación mayor y confiamos en no quedarnos con 900 mil votos, sino llegar a 1.5 millones. Esa es la meta que tenemos como partido político, un nivel que nos garantizaría el triunfo”, afirmó Mejía.