Nuevos hospitales entre denuncias de sobrecostos, demoras y obras a contrarreloj
El Gobierno promete entregar el hospital de Ocotepeque en enero de 2026, mientras que el de Santa Bárbara hasta mediados del próximo año. Sin reporte de avances los proyectos de San Pedro Sula y Tegucigalpa
- Actualizado: 06 de noviembre de 2025 a las 15:45 /
Un corto camino lodoso desde la carretera RN-20, flanqueado por un pequeño portón y un guardia de seguridad, impiden el paso a todo aquel que no sea parte de la construcción del nuevo hospital de Santa Bárbara.
“Somos periodistas y quisiéramos poder hablar con el ingeniero a cargo de la obra. ¿Él se encuentra?”, preguntamos.
El vigía, un hombre de unos 30 años, fue amable y claro: Si no han hablado con alguien de “arriba” no podrán entrar.
En la obra hay actividad. Pocos trabajadores van y vienen. "¿Sabe si este proyecto se termina antes de que la presidenta entregue el poder?", le preguntamos al guardia, y este, de forma espontánea, soltó una tremenda carcajada.
“Cómo se pone a creer, si a esto le falta más de la mitad. No ve que solo el armatoste está”, nos dijo.
Desde el drone de LA PRENSA la realidad de la obra es palpable. En efecto. Ya está armada la estructura metálica que compone el entramado del armazón, y se han colocado algunas láminas de zinc, pero nada más.
La construcción del nuevo hospital patepluma comenzó el 10 de septiembre de 2023 en un terreno donado por el difunto papá de la presidenta Xiomara Castro (según el exministro José Manuel Matheu) en las cercanías de la aldea Inguaya, a unos 20 minutos de la cabecera santabarbarense.
Este proyecto es uno de ocho prometidos en la gestión de la presidenta Xiomara Castro. Estos hospitales son: Hospital General de Santa Bárbara (Santa Bárbara), Hospital Básico de Salamá (Olancho), Hospital Básico de Ocotepeque (Ocotepeque). Los tres proyectos están a cargo de la Setcretaría de Insfraestructura y Transporte (SIT).
También está el Hospital General de Choluteca (Choluteca), Hospital Básico de Tocoa (Colón), Hospital General de Roatán (Islas de la Bahía) y los hospitales de Trauma de San Pedro Sula (Cortés) y de Tegucigalpa (Francisco Morazán), cuyo responsable es la Secretaría de Salud. En el caso de los dos de Trauma, los predios en ambos sitios ni siquiera tienen rastros del comienzo de obras.
Lento progreso en Santa Bárbara
En enero, cuando LA PRENSA Premium visitó la obra, ya estaban excavadas las cimentaciones y colocadas algunas estructuras verticales; hoy 10 meses después no se ha pegado un tan solo bloque que evidencie un avance significativo de la construcción en más de 288 días desde nuestra última visita.
Cuando faltan menos de tres semanas para las elecciones generales (domingo 30 de noviembre), y menos de tres meses para que finalice el gobierno de Xiomara Castro, en Santa Bárbara ruegan para que las obras se terminen, aunque quien inaugure sea un nuevo presidente.
Sobre cuándo estarán listos, el ministro de la SIT, Octavio Pineda, no dio detalle preciso, no obstante, adelantó que el gobierno está en proceso de entregar dos o tres de los hospitales antes del cierre de la administración.
Destacó que el Hospital General de Roatán ya está en operación, aunque admitió que uno de los techos en la parte administrativa sufrió una filtración, lo que tuvo que ser reparado de urgencia.
También detalló que existe una transición preparada para que los proyectos continúen, independientemente de quién reciba la secretaría en el próximo período.
L3,800
millones
es el costo del nuevo Hospital de Santa Bárbara. El valor original rondaba los L1,800 millones
De los hospitales a cargo de la SIT, afirmó que los de Salamá y Ocotepeque se entregarán en enero, mientras que del de Santa Bárbara solo se entregará en enero de 2026 un bloque hospitalario que comprende los módulos del 1 al 5, es decir, la parte hospitalaria.
Mientras que los módulos del 6 al 9 se entregarán entre junio y julio de 2026. Estos corresponden a la parte ambulatoria, que consiste en el hospital de día, atención de psicología, entre otras.
El costo de la infraestructura hospitalaria levantó gran polémica, pues pasó de casi 1,800 millones de lempiras a rondar los 3,800 millones, pese a que se mantiene el mismo número camas (186). Este aumento llevó a que el exministro de Salud, Manuel Matheu, denunciara una una posible sobrevaloración de precios, acusación que Pineda negó bajo el argumento que se hicieron ajustes porque los diseños originales estaban incompletos.
Nuevas instalaciones
Al temor relacionado con que la obra quede bajo abandono, en el caso del de Santa Bárbara se suma la preocupación por la falta de gestión en la búsqueda y preparación del personal que atenderá en estos nuevos hospitales.
Aunque desconocía que Santa Bárbara tendrá nuevo hospital, incluso más grande y moderno que el sampedrano Mario Catarino Rivas, el pastor Lorenzo Luna Castro de Horconcitos, Zacapa, que recién salía de su cita con el ortopeda, miraba con asombro el ajetreo en la entrada a la sala de emergencia del hospital patepluma.
Este espacio es tan pequeño, que parece que fuera la sala de una casa promedio, con la diferencia que pasa abarrotada todo el tiempo.
$200
millones
es el aumento, que a juicio de Matheu se hizo de los hospitales "sin variaciones sustanciales en el número de camas, los niveles de atención o las características básicas de los hospitales".
“No me daba cuenta que hacen un nuevo hospital. Viendo eso que tenemos enfrente, se ve que urge. Esperamos que si ya lo empezaron, lo terminen porque aquí es evidente que la gente lo necesita”, expresó.
Adentro, la emergencia es un vaivén: médicos y enfermeras van de un lado al otro, mientras los pacientes, la mayoría ancianos, esperan con la mirada triste que los atiendan pronto en medio del reinante caos.
Este hospital, fundado el 1 de diciembre de 1957 en el barrio Norte de la cabecera departamental, sirve a 19 municipios de Santa Bárbara, y a dos de su vecino Lempira y ya no aguanta para más.
Julia Mejía, subdirectora del centro asistencial, señala con orgullo que el centro Santa Bárbara Integrado no tiene mora quirúrgica, ya que ha mejorado la atención gracias a la llegada de médicos adicionales.
Destacó que tienen bien cubiertas las cuatro áreas básicas: medicina interna, cirugía, pediatría y ginecología. Además tienen médicos en algunas especialidades gracias al apoyo de médicos cubanos y especialistas que Salud les ha ido autorizando.
En cuanto a médicos, el número ha crecido poco a poco, ya que cuesta hallar galenos que quieran trabajar en el área rural. Disponen de 67 médicos generales, de los que siete están con licencia sin goce de sueldo estudiando especialidades.
También tienen 11 ginecólogos (cuatro con doble plaza), 11 pediatras, cinco cirujanos, cuatro internistas y dos ortopedas. Además tienen cinco subespecialistas: un dermatólogo, un reumatólogo, un vascular, un anestesiólogo y un cirujano.
Debido a que estos subespecialistas no forman parte del esquema básico del hospital, los medicamentos que recetan a los pacientes que asisten, tampoco son incluidos en el lote habitual.
A fin de ayudar a la gente a que se vaya sin medicinas, el personal administrativo realiza venta de tamales para comprar medicamentos y dárselo a los pacientes.
La doctora Mejía señaló que el personal médico y de enfermería que tienen en la actualidad no será suficiente cuando esté listo el hospital nuevo, por lo que desde ya hizo un llamado a todos los especialistas y subespecialistas que quieran trabajar en Santa Bárbara para que se aboquen con ella.
Más avances en Ocotepeque
En Ocotepeque, el hospital, que será un poco más pequeño que el de Santa Bárbara, pero igual al de Salamá, tiene avances más significativos.
La obra, que comenzó en febrero de 2024, ya se aprecia en todo su esplendor. Este recinto responde a una necesidad vital de la población, ya que la carencia de un centro de atención médica en la cabecera departamental obliga a muchos ciudadanos a buscar atención en países vecinos como El Salvador y Guatemala.
L1,200
millones
costará el proyecto de infraestructura en Ocotepeque. Originalmente iba a acostar L700 millones
Aquí, el hospital de categoría básica mejorará significativamente los servicios de segundo nivel de atención, con la inclusión de especialidades como ginecología y obstetricia, pediatría, medicina interna y cirugía general.
Este proyecto también sufrió un incremento de los costos: de casi 700 millones de lempiras aumentó a 1,200 millones de lempiras. El número de camas es menor comparado a obras: 40 unidades.
En el pequeño centro de salud de la Antigua Ocotepeque dos enfermeras, que luchan por no romper el viejo libro que contiene la información escrita a mano de todos los pacientes del pueblo desde 1990, se emocionan cuando les mostramos las fotos del nuevo hospital.
“Es una belleza. No imaginé que fuera tan avanzado, ojalá se cumpla mi sueño de verlo terminado y por qué no, de trabajar los últimos años que me quedan de servicio”, dijo la mujer, mientras instruía a una más joven, recién graduada.
José Antonio Peña, poblador de Sinuapa, expuso que en el departamento están contentos con el gobierno de Castro, ya que históricamente han sido un pueblo olvidado, y ahora tienen un hospital que, según les han dicho, será de “primera”.
“Aquí la gente corre para Guatemala o para El Salvador cuando se tienen alguna emergencia por una enfermedad. Eso viene ayudar en la economía porque todo se tendrá aquí”, resaltó.
Se mostró contento porque además de hospital, Ocotepeque tiene nuevas carreteras. Expresó que por años allí vivieron tapando hoyos y hoy se dan el lujo de transitar a los dos fronteras en calles nuevas. “Esperamos que nos terminen la parte de la cuesta desde El Portillo a Sianupa. Lo que falta es poco, y esperamos que lo terminen”, resaltó.
Agregó que también tienen nueva estación de bomberos. “El temor es que cuando llegue un presidente nuevo se olviden de los proyectos que quedaron iniciados. El llamado sería para que a este hospital se le dé feliz término y que sea equipado con toda la tecnología necesaria”, precisó.