Los Ángeles, Estados Unidos.
El condado de Los Ángeles continúa siendo el foco de conavirus en California con 1.541 nuevos casos positivos confirmados este miércoles, el mayor número para un día desde que se inició la pandemia de COVID-19. Los nuevos casos elevan el total del condado a 22.485.
El condado, donde residen casi 10 millones de habitantes, reportó otras 56 muertes relacionadas con el virus en las últimas 24 horas, y el número de decesos alcanzó los 1.056.
De 977 fallecidos de los que se tiene información de origen étnico 367 son latinos, según las autoridades sanitarias.
Más de 400 de los fallecidos en Los Ángeles son personas de la tercera edad que residían en asilos para ancianos.
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Entre la nueva cifra de decesos de este miércoles se registró la muerte de una persona que vivía en la calle. Este sería el tercer indigente que muere infectado con el virus.
Las autoridades de salud aumentaron la proyección del número de camas que se deben tener disponibles para atender a los pacientes de coranavirus de 1.600 a 2.000. Según la directora de servicios de salud de Los Ángeles, Christina Ghaly, la proyección aumentó después que los investigadores encontraran que los pacientes de COVID-19 están permaneciendo por más días que los previstos en el hospital.
Los Ángeles tiene este miércoles 1.940 pacientes positivos con coronavirus.
'En el condado de Los Ángeles tenemos muchos residentes que corren un riesgo muy alto de infectarse con COVID-19 y enfermarse gravemente por el virus', señaló en una conferencia de prensa la directora del Departamento de Salud de Los Ángeles, Barbara Ferrer.
'Esto se refleja en nuestros números de casos, la cantidad de personas hospitalizadas y el número de personas que han muerto por COVID-19', añadió.
Sobre el alto número de casos Ferrer advirtió que la cifra incluye el número de pruebas adicionales hechas en los hogares de ancianos, entre otros.
El condado extendió las órdenes de permanecer en casa hasta el 15 de mayo, cuando se podría ver una relajación de las normas de restricción.
Ferrer aseguró que las recomendaciones dependerán del promedio de hospitalizaciones que se sigan presentando, y la cifra de contagios.
