El pasado miércoles 11 de junio se celebró en Honduras el Día del Estudiante, en honor al natalicio de José Trinidad Reyes Sevilla, quien nació en esa fecha en 1797, en Tegucigalpa. Reyes es reconocido como el fundador de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (Unah), instituida en 1847.
La fiesta del Día del Estudiante se estableció oficialmente con el decreto de los Acuerdos Gubernativos del 28 de mayo de 1922, hace ya 103 años.
La festividad encuentra al sistema educativo hondureño enfrentando serios desafíos. Uno de los más persistentes ha sido la deserción escolar, fenómeno agravado por la pandemia de covid-19, a tal grado que las matrículas no han logrado recuperarse a los niveles previos a la crisis sanitaria.
En el sector estudiantil en sus tres niveles: pre-básica, básica y media antes de la pandemia, existía una cifra de 2,666,000 estudiantes y en el año actual, 2025, son de 1,787,116.
La situación también ha impactado a la Universidad Nacional Autónoma de Honduras y sus ocho centros regionales, en los cuales antes de la pandemia se registraba una matrícula superior a los 90,000 estudiantes, en el primer período académico de 2025, esa cifra se redujo a 68,842 alumnos. En el año 1925 se fundó la Federación de Estudiantes Universitarios de Honduras (FEUH), organización clave en la historia de la educación superior en Honduras, al lograr, el 15 de octubre de 1957, la Segunda Reforma Universitaria que estableció la autonomía universitaria y garantizó el 6% del presupuesto general de la República para la educación superior.
Desde esa fecha épica, histórica, con el presidente de la FEUH, Jorge Arturo Reina hasta el año 2025 con su presidente, Andy Moncada, y las 39,362 mujeres y 28,842 hombres la organización estudiantil sigue siendo parte y un actor importante de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras, el alma mater en un país llamado Honduras.
