La tormenta tropical Fay atravesó este sábado República Dominicana y Haití con fuertes lluvias y amenaza convertirse en huracán en las próximas horas mientras se acerca a Cuba, Jamaica, las Bahamas y la península estadounidense de Florida, informó el centro de huracanes en Miami.
El paso de Fay sobre Dominicana entre el viernes y el sábado dejó al menos un muerto y tres desaparecidos, además de importantes inundaciones, informó a la prensa el Centro de Operaciones de Emergencia dominicano.
La sexta tormenta tropical de la temporada ciclónica, que se inició el 1 de junio y se extiende por seis meses, se convertía en 'una amenaza para la vida por repentinas inundaciones y deslaves', advirtió el centro estadounidense de huracanes.
La cantidad de lluvia acumulada hasta el momento alcanzaba los 20 centímetros. A las 11H00 (15H00 GMT) Fay avanzaba dejando Haití por el oeste con vientos máximos sostenidos de 75 km/h.
El centro de la tormenta se ubicaba 155 km al oeste de Puerto Príncipe y a 205 km de Guantánamo, Cuba, donde se encuentra la base naval estadounidense.
Para los próximos dos días se espera que el fenómeno ingrese a Cuba, donde ya existen alertas de posible huracán en provincias del este.'Se pronostica un fortalecimiento para los próximos dos días... y Fay podría alcanzar fuerza de huracán en su acercamiento a Cuba el domingo', adelantó el centro de huracanes, con sede en Miami.
Las advertencias de tormenta tropical se mantenían sobre Haití, las islas de Turcos y Caicos, el sudeste de Bahamas, Jamaica, las islas Caimán y el sur de Cuba Mientras la tormenta avanza hacia el oeste se espera un giro en dirección oeste-noroeste hacia las últimas horas de hoy sábado.
El fenómeno podría alcanzar la península de Florida después de dejar Cuba el domingo, según los pronósticos.
En Miami la población comenzó a aprovisionarse ante la proximidad de la tormenta. En muchas gasolineras, supermercados y tiendas especializadas, la gente comenzaba a mostrar su inquietud mientras llenaba el tanque de su vehículo, y llevaban para sus casas agua embotellada, alimentos, linternas y velas.
En la televisión los noticieros advertían sobre la necesidad de aprovisionarse al menos para tres días en los que la tormenta puede obligar al cierre de comercios y a la interrupción del servicio eléctrico.
