El general retirado Otto Pérez ganó ayer la Presidencia de Guatemala al superar en 10.4 puntos al empresario Manuel Baldizón, una vez escrutadas 87.5% de las mesas receptoras, según datos del Tribunal Supremo Electoral, TSE.
Otto Pérez, un militar especializado en contrainsurgencia, fundador del Partido Patriota y quien prometió una política de “mano dura”, obtenía 55.2% de los votos, de acuerdo con los datos oficiales del Tribunal Supremo Electoral.
En todo el país se instalaron casi 16,700 mesas receptoras para atender a 7.3 millones de inscritos, entre ellos 1.9 millones de analfabetos, y dado que en Guatemala no existen conteos rápidos. A las seis de la tarde de ayer comenzaron a cerrar las mesas y se abrió el sistema de transmisión de resultados electorales.
La Misión de Observación Electoral de la Organización de Estados Americanos, OEA, divulgó un informe a mitad de la jornada electoral donde se congratuló por la normalidad con que se desarrollaban los comicios, aunque la asistencia llegaba al 41%
Un país pobre
Aunque la deuda social de Guatemala es gigantesca --50% de población en la pobreza, 15% de desnutridos, entre ellos 1.3 millones de niños menores de cinco años-- la campaña estuvo hegemonizada por el problema de la inseguridad, en un país con 48 homicidios por cada 100,000 habitantes, seis veces más que la media mundial.
Pérez, militar de hablar cortante, un hábito adquirido en 34 años de vida cuartelera coincidentes con una guerra civil que dejó 200,000 muertos, se alzó al tope de la intención de voto gracias a un mensaje primario (“mano dura”) y una millonaria campaña publicitaria. Baldizón sedujo votantes con sus promesas de aplicar la pena de muerte, acompañadas de un rosario de medidas populistas que ni la izquierda se animó a soñar, como el pago de un decimoquinto salario anual o clasificar a la selección de fútbol a un mundial de fútbol.
Cambios
Una victoria de Pérez marcará el retorno de un militar al poder después de 25 años de gobiernos civiles.
Esto marca el fin de la primera experiencia socialdemócrata en más de medio siglo, la del presidente Álvaro Colom, quien pese a los múltiples planes sociales y a las reiteradas ofensivas contra los carteles de la droga, apenas pudo conseguir magros resultados.
Guatemala tendrá, por primera vez, una Vicepresidente mujer, sea Roxana Baldetti, de 49 años, y compañera de fórmula de Pérez.
El vencedor hereda un Estado camino a la bancarrota, en parte responsabilidad también de esos mismos candidatos que hoy definieron la presidencial, quienes bloquearon año tras año en el Congreso los intentos de una reforma fiscal. AFP