Tres empleados del Registro Nacional de las Personas, RNP, vinculados al tráfico de documentos fueron despedidos ayer y otros ocho fueron sancionados.
Lo anterior fue revelado por el subdirector técnico del RNP, Gerardo Martínez, quien además confirmó la existencia de tres casos de tráfico de documentos detectados en los últimos días en San Francisco y La Ceiba, en el departamento de Atlántida y San Ignacio, Francisco Morazán.
“Fueron cuestiones individuales. Las personas en su momento documentaron a la gente sin requisitos”, dijo Martínez, quien agregó: “Son como tres empleados, unos por cuestión de falsificación y estamos aplicando multas y suspensión por tres, cuatro y cinco días a los empleados que obviaron los requisitos que se pedían en la ley”. El Directorio del RNP está formado, además de Martínez, por Jorge Reina García (director) y Manuel Sagastume, (subdirector administrativo).
“Estamos tomando con mucha seriedad y despidiendo a todo el personal (involucrado). La idea es limpiar el Registro”, expresó el subdirector.
Martínez dijo no estar seguro si en estos últimos casos hay jefes involucrados, pero será la Comisión Antifraude la que dará un informe al final de las investigaciones que desde hace algunas semanas se están realizando. Por el momento lo que sí está confirmado es que algunos jefes “para facilitar los trámites le dijeron a sus empleados que obviaran ciertos requisitos”.
El funcionario no dio nombres de los empleados despedidos y sancionados los cuales, explicó, laboran en varias oficinas regionales donde han cometido ilícitos cuya responsabilidad deberán deducir las autoridades de la Fiscalía.
Según las fuentes consultadas, los últimos tres casos -que se suman a varios detectados en los primeros meses de investigación de la Comisión Antifraude- están relacionados estrechamente con el tráfico de documentos cuyo propósito es la documentación de extranjeros para viajar a Estados Unidos.
En el caso de San Francisco, fue emitida una “certificación de nacimiento para que la información fuera grabada en la base de datos de Tegucigalpa y resulta que la información no corresponde a lo que tienen los asientos originales. Es una falsificación para inscribir a un extranjero”.
En San Ignacio, Francisco Morazán, se realizó “una tramitación irregular de una inscripción de nacimiento de una menor, donde aparentemente la inscriben, sustituyen un folio, le insertan otro para cambiarle el padre y ponen a un extranjero como padre”.
En la oficina regional del RNP en La Ceiba un colombiano tramitó la tarjeta de identidad hondureña.
