Presidente Hernández: 'A El Pozo III solo irá lo peor de lo peor”

Tegucigalpa, Honduras.

“A El Pozo III solo irá lo peor de los peor”, adelantó el presidente Juan Orlando Hernández en la segunda parte de la entrevista que ofreció de manera exclusiva a LA PRENSA el mandatario hondureño.

Además dijo que no está conforme con las cifras de homicidios que se cerró 2016; pero apuntó que el control sobre las cárceles ayudará a resolver este problema de largo plazo.

Advirtió que no hay marcha atrás con las medidas en los centros penales y que no habrá más concesiones para los reos.

En materia de empleo, quien resienta la situación tiene toda la razón porque hace falta mucho por hacer en generación de empleo, venimos de una crisis desde 2008 y después 2009 cuando perdimos una gran cantidad de puestos de trabajo como nunca. No obstante, se va a comenzar a ver este año un crecimiento más sostenido del agro, la construcción, más inversiones extranjeras, el tema de una política tributaria mucho más estable y menos conflictiva. Los empresarios se comprometieron que al ser aprobado el Código Tributario iban a invertir más fuerte en Honduras, y eso nos va generar empleo y más circulante. En suma, en el tema de empleo se comenzarán a ver las cosas de manera más sostenida.

No pudiera estar satisfecho ni contento, porque a pesar que la tendencia a la reducción se mantiene, cada cifra de un punto representa miles de personas; claro, si usted mira de donde venimos desde 2010, 2011, 2012 y 2013 el avance es significativo y probablemente somos el país que más hemos avanzado en el continente; pero falta mucho todavía. En ese sentido, yo diría que se empieza a ver que el último eslabón del plan para resolver este problema de largo plazo que son los centros penales ya los empezamos a tocar, cosa que antes la gente ni siquiera mencionaba.

Ya están los diseños, tenemos cinco posibles escenarios y como no será una cárcel muy enorme, lo más difícil será la logística para llevar los materiales; pero ya tenemos bastante adelantado eso.

Lo peor de lo peor para proteger al pueblo hondureño. Aquellos que creyeron que iban a seguir delinquiendo, ordenando extorsiones, masacres, asesinatos y secuestros desde la cárcel y que pensaron que iban a seguir burlando al Estado, esos van a estar aislados, sin llamadas, sin ver a sus familias, una hora de sol al día, y si persiste su comportamiento agresivo y difícil también hay algo más especial en ese tipo de cárcel para castigarlos.

Foto: La Prensa 'De algo que me siento orgulloso es de haber impulsado el programa Vida Mejor. Es el programa social de mayor impacto en la historia de este país”, dijo el Presidente.

Yo diría que tiene razón la gente de dudar un poco; pero este tercer año y sabiendo cuál ha sido nuestra conducta y convicción, lo que pueden esperar es un proceso consolidado, y como dije el día de mi toma de posesión es que vamos de frente con todo. No hay vuelta atrás y no podemos retroceder un tan solo milímetro.

Ese es uno de los grandes desafíos que el país tiene todavía, yo busqué que en el acuerdo con la OEA y la Maccih (Misión de Apoyo Contra la corrupción e Impunidad en Honduras) pudiera quedar la depuración, reestructuración y certificación de fiscales y jueces. Afortunadamente el Fiscal General y el actual presidente del Poder Judicial de manera clara y contundente también plantearon ese compromiso y ellos me dijeron que están en sus planes de trabajo. Entonces la sociedad y las instituciones debemos acompañar ese proceso, porque la justicia tardía no es justicia.

El contexto mundial ha cambiado. Entonces ante un fenómeno tan violento, tan perverso y tan sofisticado y complicado en su accionar, tenemos que construir nuevas reglas porque no son las del siglo pasado las que nos van a sacar de esta situación, por eso en términos más puntuales se va tipificar como terrorismo que el jefe de una mara ordene que en una colonia no pueda vivir una persona que no sea de su mara, eso es terrorismo, y si mandan un mensaje amenazando y aparece en la pantalla de televisión y de paso sacan un proyectil que le mandan a la gente o lo meten por debajo de la puerta, ese es un acto de terrorismo y el Estado tiene que verlo como tal.

Todavía no, sí hemos dado pasos importantes, yo creo que nunca Honduras había avanzado en un proceso de depuración en el que se han ido más de 2,500 personas, empezando por la cúpula policial, luego el proceso que poco se publicita de nuevos agentes, ya van 4,500, luego este año vamos a sacar otros 4,000. Diría que vamos avanzado de manera contundente, clara y con resultados; pero falta todavía.