La vida de Carlos Melgar, un joven de 23 años originario de Taulabé (Comayagua) cambió por completo en el año 2020, cuando fue diagnosticado con insuficiencia renal crónica.
Desde entonces, su rutina se ha visto marcada por sesiones de diálisis tres veces por semana, un procedimiento que, aunque necesario para mantenerlo con vida, ha sido física y emocionalmente desgastante.
Durante más de cinco años, Carlos ha luchado con valentía contra una enfermedad que no solo afecta su salud, sino también su movilidad, energía y estabilidad. A pesar de ello, quienes lo conocen aseguran que jamás ha perdido su deseo de vivir ni su espíritu amable y optimista. Sin embargo, hoy enfrenta el momento más difícil desde que inició su enfermedad.
Esperanza
Las complicaciones que Carlos ha presentado en las últimas semanas han hecho que su caso se vuelva más delicado. Los médicos han determinado que necesita someterse a hemodiafiltración en El Salvador, al cual deberá viajar semanalmente para completar las evaluaciones y prepararse para un trasplante de riñón, su única opción para recuperar calidad de vida.
Este procedimiento previo es indispensable para que pueda ser considerado candidato al trasplante, pero implica tiempo, esfuerzo físico y la disposición de un donante compatible.
La familia de Carlos hace un llamado urgente a la población hondureña: se necesita un donante de riñón compatible que permita que el joven pueda someterse al trasplante.
Las personas interesadas en iniciar un proceso de evaluación pueden llenar el formulario habilitado.
Además de la búsqueda del donante, la familia enfrenta la carga económica que representan los viajes semanales a El Salvador. Los gastos incluyen transporte, alimentación, medicamentos, consultas, exámenes médicos y hospedaje.
Apoyo
Para quienes deseen apoyar, se han habilitado las siguientes cuentas bancarias:
Cuenta Atlántida
Héctor Arnoldo Castro Alcerro - 00002020789638
DNI para transferencias ACH: 0801-1965-10159
Cuenta BAC
Gladys Gissela Castro Doblado - 753980481
Tras cinco años de lucha ininterrumpida, Carlos necesita más que tratamientos: necesita esperanza, apoyo y la solidaridad de quienes puedan tenderle una mano.
Su familia agradece profundamente a quienes compartan su historia, colaboren o simplemente envíen un mensaje de aliento. Cada aporte, cada gesto y cada donación lo acerca más a la oportunidad de vivir sin depender de máquinas y tratamientos continuos. En la solidaridad de las personas, Carlos encuentra la esperanza que mantiene vivo su sueño de sanar.