El hondureño Bayron Escoto contó cómo fue su experiencia en hospital de España “con Jesucristo”, a través de un hombre desconocido que lo interceptó en un ascensor el día en que supo del diagnóstico.
Hay más de 11,000 pacientes renales y casi nadie accede a trasplantes por falta de dinero y donantes. La mayoría de receptores que lo lograron fue gracias a familiares.