Cada semana de tres a cinco vuelos llegan al territorio con compatriotas deportados de Estados Unidos.
De acuerdo con Wilson Paz, director del Instituto Nacional de Migración (INM), en menos de dos meses se deportaron 5,150 hondureños desde Estados Unidos y México. Cerca del 80% de los retornados proceden de Estados Unidos; la mayoría permanecieron varios meses en centros de detención esperando su deportación. El resto ha sido retornado vía terrestre desde México.
Desde el 21 de enero, al menos 200 connacionales han llegado en cuatro aviones militares (78, 17, 40 y 44 deportados en cada vuelo) enviados por la administración del presidente estadounidense, Donald Trump, como parte de sus políticas migratorias, aseguró el funcionario.
Durante enero fueron deportados más de 3,600 hondureños (70% del total), y en lo que va de febrero se han registrado unos 1,545, por lo que la cifra al cierre de este mes podría igualar a la del mes anterior. Las autoridades descartaron que la llegada de hondureños en los primeros meses de 2025 fuese masiva, como muchos sectores estimaban.
Para esta semana son cinco vuelos comerciales más que están programados aterrizar en el Aeropuerto Ramón Villeda Morales de San Pedro Sula, en los que vendrán más compatriotas deportados.
Las autoridades no descartan que, además, de los vuelos que ya están pactados llegue al territorio un vuelo militar.
En enero de 2024 arribaron 3,226 hondureños deportados, la mayoría de Estados Unidos y México; mientras que febrero cerró con 3,024 deportaciones.
Según el INM, el 19% de los retornados son agricultores, mientras que el 15% se dedicaba al sector de la construcción. El resto se identifican como pintores, mecánicos, comerciantes, soldadores, electricistas, carpinteros, entre otras profesiones y oficios.
Para el vicecanciller Antonio García, la llegada masiva de compatriotas deportados fue más una crisis mediática que se generó con la llegada de una nueva administración en Estados Unidos.
“En relación con el año pasado los números son casi iguales, no hay diferencia, no hay mucha diferencia importante, lo que quiere decir que por el momento es una crisis mediática y sobre todo en Estados Unidos, donde están tratando de decirle a la gente que hay un problema grande y un conflicto hostil, pero en cuanto al número, venimos casi igual”, dijo García.