Ante los múltiples cuestionamientos por parte de diferentes sectores Alba Consuelo Flores, ministra de Salud, dijo este jueves que el cierre de los triajes no ha sido un tema a ligera.
De acuerdo con la funcionaria, esta es una decisión analizada y tomada tras la falta de afluencia de personas a estos centros.
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“Este decisión no es una improvisación, lamentablemente tenemos que luchar contra un tema cultural en nuestro país porque la población no está llegando a los triajes. Por ello, decidimos cerrar algunos y enviar a este personal a los barrios y colonias para captar sospechosos”, dijo Flores.
La ministra explicó que el personal médico estaba siendo desaprovechado y ahora serán enviados a las comunidades para la captación temprana de pacientes.
“Sin embargo, las regiones sanitarias tienen instrucciones de que en caso que se diera una situación crítica por aumento de pacientes con coronavirus deben volver a abrir los triajes para la primera atención”.
Flores mencionó que los triajes tenían alrededor de tres meses de no recibir pacientes. “No podíamos tener este personal sin hacer nada, ahora la estrategia es salir a captar pacientes”.
Un informe del Foro Nacional de Convergencia (Fonac) reveló que más de 100 centros de triaje y estabilización han suspendido labores en diferentes municipios del país, lo que a criterio de esta plataforma de la sociedad civil se constituye en un mayúsculo problema, ya que hace incrementar la demanda de servicios hospitalarios en los nosocomios de los más importantes centros urbanos del país.
Por su parte, los médicos han expresado su enorme preocupación ante la confirmación clínica de la nueva variante ómicron en Honduras.
“Los triajes no se pueden cerrar sobre todo en este momento, es como que si tuviéramos en la nuestra costas la presencia de un huracán y pretender que no va a pasar. Esta nueva variante debe de ponernos en alerta por su rápida propagación”, dijo el científico Marco Tulio Medina.
