El Gobierno destinó unos 100 millones de dólares, (unos 2,465,000 lempiras) para la construcción de una nueva línea de transmisión de energía para el litoral atlántico.
Así lo anunció el gerente de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (Enee), Lucas Ramos, durante una reunión virtual con empresarios y autoridades de la región atlántica.
La línea 516, que viene de El Progreso y provee el sistema interconectado nacional de la central hidroeléctrica Francisco Morazán (El Cajón), ya está obsoleta y constantemente presenta fallas, dejando sin energía a esta región.
Son 171 kilómetros de conducción que serán reemplazados en dos años. El presupuesto ya fue aprobado por Finanzas: $76 millones serán para la instalación de la nueva línea, y el resto, 24 millones, para repotenciar las subestaciones térmicas.
Los empresarios del litoral, aglutinados en las cámaras de comercio de Atlántida y Colón, así como la Cámara de Turismo y la Asociación Nacional de Industriales (Andi), llevan varios años presionando para que el Gobierno solucione el problema de los apagones. “Hemos estado esperando esta inversión por más de dos décadas. Esperemos sea cierto porque nos han mentido en los últimos diez años”, expresó Edilberto Ibarra, presidente de la Andi.
PARA SABER
1__La demanda de energía en el litoral atlántico es de 145 megas. En horas pico, la demanda sube a entre 165 y 170.
2__Con unos 2,500 millones de dólares anuales contribuye el litoral atlántico al producto interno bruto (PIB).
Para paliar a corto plazo la falta de energía, el Gobierno se comprometió a dotar de 60 megas en agosto con línea de transmisión de El Yaguala, hidroeléctrica que se construye en el departamento de Yoro. Asimismo, 20 megas de un excedente de una planta de carbón en Tocoa y 50 megas más de energía fotovoltaica de generación privada.
Asimismo, se informó que ya se cuenta con un presupuesto para cumplir con una serie de mantenimientos a la línea de transmisión que es la que genera el 70% de las fallas.
Unos 50 millones de lempiras es la pérdida que genera al empresariado del litoral atlántico, en 40 horas promedio al mes de interrupciones de energía.
