La Empresa Nacional de Energía Eléctrica (Enee) no ha logrado bajar las pérdidas totales. Por cada 100 megavatios de energía generada, 38.85 son pérdidas por distribución y transmisión.
Entre el 30% y 32% corresponden a pérdidas de distribución y el restante 6% u 8% son por transmisión.
El boletín estadístico de octubre pasado revela que la generación neta alcanzó 8,975.5 gigavatios en 10 meses del año.
Las ventas sumaron 5,487.7 gigavatios, dejando 31,640.2 millones de lempiras en ingresos. El costo promedio total por kilovatio hora fue de 5.7656 lempiras.
No obstante, las pérdidas de enero a octubre de este año sumaron 3,487.8 gigavatios por un valor de 20,109.25 millones de lempiras.
Según el boletín estadístico de la Enee, la generación neta de energía en 2022 fue de 9,964.5 gigavatios y ventas por 6,379.5 Gwh e ingresos de 36,993.5 millones de lempiras.
El costo promedio del kilovatio fue de 5.7988 lempiras. Las pérdidas alcanzaron 3,585 gigavatios por la suma de 20,788.69 millones de lempiras.
Reducción de pérdidas
Este es el principal reto de la empresa y que desde agosto de 2016 fue parte de un plan para bajarlas de 31.95% a 14.95% en un periodo de siete años bajo la gestión de la Empresa Energía Honduras (EEH) y que no fue logrado por el mencionado consorcio.
Expertos en el sector eléctrico de Honduras sostienen que la estrategia de la Enee para reducir las pérdidas, la que cuenta con más de 4,500 personas entre sus empleados, el Programa Nacional de Reducción de Pérdidas (PNRP) y la Unidad Técnica de Control de Distribución, no se está reflejando en el balance de la empresa.
Agregan que las elevadas pérdidas es una de las causas de la insolvencia que atraviesa la estatal eléctrica y que ha impactado en la morosidad que tiene con los generadores privados, la que supera 16,000 millones de lempiras. Cada punto de energía perdida en el sistema de la Enee representa alrededor de L520 millones.
