La directora gerente del FMI (Fondo Monetario Internacional), Christine Lagarde, advirtió ayer de que se requieren acciones “urgentes” en la zona euro, aunque abogó por dar tiempo a la consolidación fiscal en los países con más problemas.
Lagarde situó a Europa como el “epicentro” de la actual crisis y consideró que, a diferencia de lo que se indicó en la reunión de primavera del organismo, en la actualidad esta “no solo afecta a las economías avanzadas”.
La ralentización se está extendiendo a los países emergentes, pero lo que el FMI considera prioritario en las condiciones actuales de “incertidumbre” es que en la zona euro haya más acciones y se apliquen “más rápido”.
La titular del Fondo Monetario aplaudió varias medidas ya tomadas, como la operación de financiación a largo plazo del Banco Central Europeo de principios de este año y, lo que considera más importante, el nuevo programa de transacciones monetarias directas.
Pero también cree que es necesario agilizar algunas decisiones tomadas que se están materializando solo de forma “gradual”, como el diseño de un sistema europeo de supervisión bancaria.