Hacía menos de 24 horas se encontraba departiendo con su familia con el usual sentido del humor que lo caracterizaba, y ayer, cuando el reloj marcaba las 3:00 pm, en una tarde lluviosa, seres queridos, amigos y excompañeros sepultaban los restos mortales del otrora jugador del Vida Borghi Arbizú (23).
Su cuerpo descansa ya en el cementerio general del barrio Inglés de esta ciudad. “Vivirás en nuestros corazones, pese a tu corta carrera en el deporte demostraste temple y categoría a que lamentablemente no le dieron seguimiento dirigentes y técnicos”, decía frente a su tumba Carlos Arbizú, padre del infortunado futbolista.
Arbizú fue atacado a puñaladas la noche del lunes por un individuo desconocido en la colonia Gonzalo Rivera. El deportista murió cuando era atendido en la sala de emergencias del Hospital Regional Atlántida.
Su cuerpo fue velado en el Cuerpo de Bomberos del barrio Inglés, hasta donde llegaron amigos y antiguos compañeros del equipo para acompañar a los dolientes.
La comitiva de jugadores, encabezada por Jorge Lozano, se hizo presente al velatorio, en el cual privaba por ratos un extremo silencio que solo era interrumpido por repentinos gritos y llantos de los dolientes.
El padre del fallecido los recibió en la entrada de edificio, adonde permanecía en una silla de la cual apenas logró levantarse, pues se resistía a aceptar el trágico destino de su vástago.
Los jugadores rindieron un homenaje a quien fuera su compañero y se solidarizaron con Carlos Arbizú, actual jugador del Vida y hermano mayor de la víctima.
Los futbolistas elevaron plegarias a Dios para rogar por el descanso del Arbizú y pedir fortaleza para sus parientes. “No estas solo, aquí estamos, Dios te dé fortaleza para afrontar esta dura situación”, dijo Jorge Lozano a su compañero.
La última llamada
El progenitor del fallecido, en medio de su dolor y desesperanza, recordó que la noche del lunes estaban en casa cuando su hijo recibió una llamada telefónica y luego salió de su casa.Instantes después se supo que había discutido con otro muchacho, el que lo hirió con un puñal en el pecho, lo que le provocó la muerte instantes después.
“Me llevaron a mi hijo, me lo mataron, me lo mataron, qué hago ahora”, decía entre llantos. “Lo llamaron y salió, nunca imaginé que sería para que me le arrebataran la vida”, se lamentaba.
“No se trata de ataques a futbolistas”
Autoridades de la DNIC (Dirección Nacional de Investigación Criminal) indican que tanto el ataque ocurrido la semana anterior en contra de John Bodden, quien recibió un disparo en la clavícula y que lo mantiene hospitalizado, así como la muerte de Borghi Arbizú, son dos casos aislados.
“El caso del portero del Victoria, según investigaciones, fue por robarle pertenencias y el vehículo, y en el caso del que fuera jugador del Vida son circunstancias que se están investigando; pero no vemos ninguna conexión entre ambos casos, o que se trate de personas que quieran causar daño a los deportistas”, sostuvo el inspector Miguel Suazo.
El agente Lenín Perdomo dijo que se tomarán declaraciones de testigos, ya que se han identificado grupos de malvivientes que delinquen en las cercanías de las colonias Melgar y Gonzalo Rivera, adonde fue atacado Arbizú. Familia exige justicia.
