Las redes sociales se han convertido en una extensión de nuestra vida cotidiana. Sin embargo, la sobreexposición y la falta de precaución pueden convertir nuestra información personal en un arma para los ciberdelincuentes. Según expertos como Camilo Gutiérrez Amaya de Eset Latinoamérica, compartir información personal identificable (IPI) como nombres de mascotas, fechas de nacimiento o planes de viaje, es un error común que facilita la suplantación de identidad y los robos.
"Es crucial entender que cada dato que compartimos es una pieza de un rompecabezas que los ciberdelincuentes pueden armar para perjudicarnos", afirma Gutiérrez Amaya.
Además de los errores clásicos, el año 2025 trae consigo nuevas amenazas impulsadas por la inteligencia artificial (IA). Los deepfakes, por ejemplo, son videos y audios manipulados que pueden utilizarse para fraudes y desinformación. "Debemos ser escépticos y verificar la autenticidad de todo lo que vemos en línea", recomienda Uptodown.com.
Las estafas también evolucionan. Los ciberdelincuentes aprovechan el auge de los juegos y películas para crear fraudes con claves digitales y pedidos anticipados falsos. Asimismo, las estafas con suscripciones a servicios digitales están en aumento, por lo que se aconseja revisar cuidadosamente los términos antes de suscribirse.
Expertos en ciberseguridad como Camilo Gutiérrez Amaya de Eset Latinoamérica y Uptodown.com ofrecen recomendaciones para proteger la privacidad en redes sociales.
Camilo Gutiérrez Amaya destaca la importancia de no compartir información personal identificable (IPI) como nombres de mascotas o fechas de nacimiento, ya que pueden ser utilizados por ciberdelincuentes para suplantar identidades. También recomienda evitar publicar planes de viaje y datos de ubicación para prevenir robos y otros delitos.
Uptodown.com sugiere configurar las opciones de privacidad en plataformas como Facebook, Instagram y Twitter para controlar quién puede ver la información personal. Además, enfatiza la necesidad de limitar el acceso a datos sensibles y utilizar funciones como cuentas privadas en Instagram y protección de tuits en Twitter.
Ambos expertos coinciden en que mantener la privacidad en redes sociales es crucial para protegerse de amenazas digitales y físicas.
Recomendaciones clave:
La compañía líder en detección proactiva de amenazas, Eset, asegura que para mantener protegida toda la información personal que circula y lejos del alcance del cibercrimen, es necesario aplicar buenas prácticas que aseguren su integridad y privacidad.
A continuación los 10 mandamientos de la seguridad en redes sociales:
1. Publicar solo lo necesario: Cualquier información que se publique en las redes sociales es una puerta que se abre de tu vida privada. Y solo alcanza con que esa información caiga en las manos erróneas para vivir una situación indeseada, ya sea de suplantación de identidad, estafa o engaño.
Un párrafo aparte merece la publicación de fotografías de niños y niñas. Sobre todo, porque las leyes de protección del menor son cada vez más fuertes respecto del cuidado de la privacidad infantil, contemplando que todo lo que se publica en internet queda fuera del control de quién lo publicó.
2. Configurar la privacidad de cada cuenta: El cibercrimen ha evolucionado a tal punto que cualquier datos puede servir para suplantar la identidad o para llevar adelante algún tipo de estafa. Es por eso que información tan sensible como nuestra fecha de nacimiento, lugar de residencia, trabajo o estudio puede ser utilizado en nuestra contra.
Gestionar la privacidad de la información de manera correcta y consciente en cada cuenta que tengamos perfil, es la mejor manera de proteger esta información. Los datos son considerados el nuevo petróleo y son tan atractivos tanto para las empresas como para los cibercriminales.
Eset recomienda que antes de publicar algo se analice brevemente si es información que pueden ver todos, y en caso de que no lo sea quizás lo mejor sea no publicarla. Esto refuerza la importancia de prestar atención a los permisos que damos a las aplicaciones que instalamos o a los servicios en los que creamos una cuenta.
3. Desconfiar de las personas que no se conocen: Más allá de todos los beneficios que tiene Internet, también existe un Lado B que es necesario tener en cuenta para no llevarse un gran disgusto. Los casos de fraude o acoso lamentablemente son muy comunes en el mundo digital y las redes sociales se han convertido en un nicho cada vez más explotado por los cibercriminales para realizar este tipo de prácticas.
La cautela y la desconfianza son dos grandes aliados a la hora de entablar algún tipo de contacto o relación con alguna persona desconocida. Por eso nunca es recomendable aceptar solicitudes de amistad de desconocidos, como tampoco proporcionarles información personal.
4. Verificar antes de hacer clic en los enlaces que llegan por mensajes: A través de nuestras redes sociales se reciben mensajes de contactos desconocidos, con promesas de algún beneficio/premio y un link que parecería ser la llave que abre el cofre del tesoro.
Pero no: un clic puede derivar a un sitio comprometido que solicita nuestros datos personales o bien a la descarga de software malicioso. Desde Eset sugieren seguir una regla de oro que en estos casos aplica de manera efectiva: cuando algo es demasiado bueno para ser verdad, probablemente no lo sea.
5. Elegir contraseñas largas y complejas: Optar por una contraseña robusta y extensa es otro gran paso para proteger las cuentas de las diferentes redes sociales. Idealmente, deben ser frases que incluyan alrededor de 20 caracteres, letras, números, mayúsculas y caracteres especiales.
Un último tip es no reutilizar la misma contraseña en diferentes cuentas, ya que, si una se ve vulnerada, le dará al ciberatacante acceso al resto de las redes sociales. Un gran aliado para crear contraseñas fuertes y no tener que recordarlas es la implementación de un administrador de contraseñas.
En la era digital, la privacidad es un tesoro que debemos proteger con diligencia. Estar informados y ser cautelosos es la mejor defensa contra los riesgos que acechan en las redes sociales.