Te dispones a revisar tu correo electrónico disfrutando de una taza de café, una lata de refresco o un vaso de agua. Te descuidas un momento y… desastre, el líquido cae sobre tu pobre computadora.
¿Qué hacer en esos casos? He aquí algunos consejos.
1. Cada segundo cuenta
- No pierdas la calma y actúa rápido
- Apaga la computadora y desenchufa todo lo que esté conectado a ella: cable de corriente, ratón, audífonos, disco duro externo… todo.
- Voltéala, eso evita que el líquido penetre más profundamente.
- Consigue algo para limpiar el exceso de líquido, como un paño seco.
- Extrae las piezas que puedas sacar, como por ejemplo la batería.
- Si se trata de un líquido pegajoso, limpia los restos con un algodón mojado en alcohol.
- No fuerces ninguna pieza tratando de sacarla; si tienes el manual de usuario, sigue las instrucciones que ofrece para estos casos.
- Déjala secando de 24 a 48 horas (dependiendo de cuánto se haya mojado).
- Deja la tapa levantada para permitir la circulación del aire.
- Si quieres apurar el proceso, puede usar un deshumidificador.
- NUNCA uses un secador de pelo.
- Si tienes la paciencia, intenta con una aspiradora portátil.
Cuando el aparato es de diseño cerrado (y por tanto no se puede abrir) algunos usuarios han tenido buenos resultados colocando el aparato en una bolsa llena de arroz seco para ayudar a secarla.
No olvides revisar la garantía. En algunos casos estas cubren ciertos daños accidentales y lo mejor es llevarla con el servicio técnico especializado. Sobre todo no intentes desarmar tu mismo pues en ese caso se anula la garantía y podrías terminar por estropearla aún más.